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Durante los últimos veinte años, hemos observado y analizado cada vez más cómo la humanidad está destruyendo nuestro mundo, nuestra civilización y, finalmente, a sí misma. Se ha vuelto "normal", como un pasatiempo. Lo disfrutamos, a lo que contribuyen las películas de Hollywood —a menudo "proyectadas películas de planificación" por nuestros medios de comunicación—, así como innumerables libros y artículos; las guerras, los conflictos y las matanzas se han convertido en la norma de nuestra vida cotidiana.
A los conflictos, guerras y otras máquinas de matar, se suma la amenaza constante de nuevas plandemias, como acaba de anunciar el director de la OMS, el Sr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien afirma que la próxima pandemia podría estar a la vuelta de la esquina y que el mundo debería estar preparado e invertir mucho más en servicios de salud. Gobiernos, por favor, dejen de dudar en aprobar el «Tratado de Pandemias» , sea lo que sea.
Este violento "juego" de destrucción —permítanme llamarlo juego por ahora— también es una herramienta perfecta para el Estado Oscuro Profundo. Cada vez estamos más cerca de saber quién o qué es, y también una herramienta perfecta para infundir miedo en la sociedad. Y el miedo es, literalmente, alimento para los no humanos que se empeñan en controlar a la humanidad.
El objetivo final de estos fanáticos del control no humanos será un mundo completamente digital, impulsado por inteligencia artificial (IA), que depende de un pensamiento lineal y tridimensional que sabemos que nunca funcionará porque los humanos, la Madre Tierra y el Universo no son lineales, sino dinámicos, y nuestras capacidades espirituales son de dimensiones cuánticas.
Así que no se dejen intimidar, sino más bien piensen en cómo salir de esta sociedad destructiva y comenzar de nuevo, saltar a lo básico: la ética, los valores humanos, como la solidaridad, la armonía, la unión y el AMOR.
Peter Koenig
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