Una nueva raza de estos insectos, conocida como "gallinippers", tiene 20 veces el tamaño de uno normal, amenaza este verano con caer sobre Florida, aunque salvo la dolorosa picadura, no entraña peligro alguno para la salud. El mosquito gigante puede perforar incluso un tejido fino con su largo aparato bucal y luego la piel para succionar sangre.