Ahora Europa y el Reino Unido están impulsando con fuerza la identificación y las monedas digitales. No buscan la comodidad de sus ciudadanos, sino un control totalitario sobre la población. Este es el Gran Reinicio del FEM en acción, el cumplimiento de la profecía distópica de George Orwell de 1984.
Una moneda digital centralizada y controlada por un gobierno (una CBDC) es la herramienta definitiva para controlar a todos. Si haces algo que no le guste al gobierno, te cerrarán las cuentas y te confiscarán el dinero. La vinculación de las CBDC a tu identificación digital, billetera digital o cuentas bancarias es lo que les otorga su poder.
Todo el mundo habla de la identificación digital, pero, por favor, entiendan que ese no es el objetivo final. Es la distracción. El panorama general es la libra digital del Banco de Inglaterra. Y debemos leer la letra pequeña.
El Banco de Inglaterra afirma: «La libra digital sería una nueva forma de dinero para hogares y empresas. Sería emitida por el Banco de Inglaterra, estaría ampliamente disponible y sería fácil de usar». (Banco de Inglaterra)
Suena inofensivo. Nos aseguran que "complementará al efectivo, no lo reemplazará", y que solo se usará "si así lo decides". Pero la historia nos muestra con qué rapidez la elección se convierte en obligación.
Primero opcional, luego esperado, luego obligatorio.
El dinero en efectivo no desaparece de la noche a la mañana, pero si se lo priva de uso, muere silenciosamente.
Este es el punto crucial: para que una libra digital funcione, no puede existir sin una identificación digital. Por eso, el debate sobre la identificación está acaparando titulares ahora mismo: porque suaviza el terreno.
Una vez que tu identidad esté vinculada a tu dinero, cada transacción será rastreable y cada decisión quedará registrada. Lo que llaman "seguridad" es, en realidad, vigilancia. El propio Banco admite: "Se accedería a la libra digital a través de monederos digitales ofrecidos por el sector privado".
Eso significa que empresas externas, no tú ni yo, se interpondrán entre nosotros y nuestro propio dinero. Verificarán la identidad, impondrán condiciones y mediarán en el acceso. Esto crea un sistema donde tu libertad financiera no es un derecho, sino un servicio.
Sí, prometen salvaguardas: «Ni el Gobierno ni el Banco de Inglaterra tendrían acceso a sus datos personales». Pero las políticas se pueden reescribir, las leyes se pueden manipular y las crisis se pueden generar. Una vez que el sistema existe, basta con una emergencia para activarlo.
La privacidad no es permanente. No se trata solo de un cambio económico. Es constitucional. Cuando el dinero y la identidad se fusionan, el acceso a la propia vida se vuelve condicional. Hablar fuera de lugar, pasarse de la raya, resistirse... y en las manos equivocadas, el acceso puede ser denegado. No por ley, ni por el debido proceso, sino por la negación silenciosa de una transacción.
A los ciudadanos del Reino Unido: no se dejen distraer por el titular de la identificación digital. Esa es la superficie. La esencia es la libra digital. Una vez introducida, alterará fundamentalmente la relación entre los ciudadanos, el Estado y la libertad.
Y como el propio Banco confirma, esto ya está en marcha. No debemos caer en esto sin darnos cuenta. Debemos cuestionar, analizar y exigir protecciones reales, no promesas vagas. Porque una vez que la libra digital esté aquí, no habrá vuelta atrás.
Tony Blair: “La vacunación es el camino hacia la libertad”
Será muy difícil que las personas lleven una vida normal si no pueden demostrar su estado de vacunación.
Problema. Reacción. Solución.
Esto significa que inventan el problema para obtener la reacción esperada de la población y luego implementan su solución para salvar el día. Siempre recurren a alguna forma de caos o agitación violenta. La guerra es su método habitual, pero el colapso económico y el caos resultante son muy efectivos. Parece que esto es lo que pretenden, y te dirán que lo han resuelto con su economía digital del Nuevo Orden Mundial.
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La Unión Europea planea lanzar su CBDC (el euro digital) en octubre de este año, a pesar de la abrumadora oposición de la mayoría de los ciudadanos de la UE.
Será totalmente programable. Eso significa que podrán controlar en qué gastas tu dinero.
“Por ejemplo, podrían restringirte la compra a solo dos prendas de vestir al mes, en nombre de la lucha contra el cambio climático”.
“O podrían exigirle que gaste sus ahorros antes de una fecha determinada, de lo contrario sus ahorros desaparecerían, solo para estimular la economía”.
“En ese momento, ya no nos queda libertad financiera”.
Si quieres conservar tu libertad, debes resistirte tanto a la identificación digital como a las monedas digitales centralizadas (CBDC). ¡Esta es la mayor estafa jamás inventada! ¡No caigas en ella!
John Gideon Hartnett
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