“Las consecuencias de la inflación son la mala inversión, el despilfarro, una redistribución desenfrenada de la riqueza y el ingreso, el crecimiento de la especulación y el juego, la inmoralidad y la corrupción, la desilusión, el resentimiento social, el descontento, la agitación y los disturbios, la quiebra, el aumento de los controles gubernamentales y, finalmente, el colapso ” .
~ Henry Hazlitt
Mientras el circo político llamado gobierno continúa destruyendo este país y el mundo para crear una población esclava totalmente controlada, gran parte de los medios tradicionales, y la mayoría de los llamados medios "alternativos", siguen babeando y aplaudiendo la locura completamente dictatorial del genocida Trump. Es repugnante ver lo que está sucediendo, y los estadounidenses estúpidos siguen peleándose entre sí y con otros en todo el mundo, sin comprender que les han lavado el cerebro para hacer precisamente eso. Al mismo tiempo, esta economía está a punto de implosionar, a propósito, por supuesto, y la mayoría no tiene ni idea del alcance masivo de esta aniquilación planificada de todo este sistema en favor de un "reinicio" para impulsar una prisión totalmente digitalizada, global, biométrica, con inteligencia artificial y tecnocrática.
Deténganse y consideren las circunstancias actuales de este país, y luego pregúntense por qué han permitido que esta debacle financiera, políticamente motivada y totalmente inmoral, llegue a esta etapa de fracaso, con solo unos pocos levantando un dedo para detenerla. La gente común, la mayoría de los trabajadores estadounidenses, y especialmente los jubilados con ingresos fijos, están siendo literalmente empujados a la pobreza extrema, y pronto ni siquiera podrán tener vivienda ni alimento. Esto, por supuesto, beneficiaría a la clase dominante, ya que haría a la mayoría completamente dependiente de los servicios públicos. Esto permitirá el control total de la mayoría de los estadounidenses, que tienen pocos o ningún ahorro, y que están presenciando un aumento de precios a tasas inimaginables.
Esta es la mayor burbuja económica de la historia, y la primera que ha existido en Estados Unidos que incluye todos los mercados a la vez. El mercado bursátil, el de bonos y el inmobiliario se han disparado hasta alcanzar un nivel demencial. Esta burbuja económica es mucho peor que el casi colapso de la crisis financiera de 2008, durante la quiebra del mercado. La solución gubernamental a lo que causó inicialmente fue imprimir billones y billones de dólares falsos, rescatando a los bancos en quiebra y a Wall Street, mientras los multimillonarios aumentaban drásticamente su riqueza, todo a expensas de toda la población estadounidense. Ustedes pagaron por todo eso, y ahora se enfrentan a una recesión mucho más terrible.
La gente de todo el país se encuentra en una situación desesperada, luchando por sobrevivir. Las viviendas se han vuelto inaccesibles para la mayoría, y la situación empeora. Los compradores de viviendas se enfrentan a extremos increíbles, ya que los costos de los seguros, debido al mercado inmobiliario descontrolado, los fenómenos meteorológicos manipulados y los incendios provocados, se duplican, triplican y aumentan. Los impuestos a la propiedad, una atrocidad, están alcanzando niveles astronómicos, mientras que quienes pagan cuotas de la asociación de propietarios (HOA) sufren aumentos masivos y "evaluaciones especiales" casi imposibles de superar. En medio de todo esto, los precios de los alimentos están por las nubes, al igual que todos los demás costos y servicios imaginables.
Este sistema de gobierno extremadamente inflacionario, respaldado por la atroz Reserva Federal, continúa creando moneda de la nada por billones y billones de dólares, impulsando la deuda a niveles inimaginables para la mayoría. Debido a estos factores, al riesgo geopolítico que incluye una guerra abierta, aranceles desorbitados, la inflación monetaria y otras medidas proteccionistas y políticas, el costo de sobrevivir se vuelve cada día más difícil para los estadounidenses. La deuda personal, por supuesto, está en máximos históricos, ya que muchos se han visto obligados a pagar sus facturas con tarjetas de crédito, lo que aumenta aún más la deuda. Dado que la responsabilidad personal se ha abandonado en gran medida, el gobierno ha empujado la deuda a la estratosfera, la falta de vivienda ahora es común en todo el país. Esto no solo afecta a los indigentes o a los inmigrantes con dificultades, sino que también ha consumido a los ancianos con ingresos fijos en muchas partes de EE. UU. Muchos se quedan esperando…
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