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Le blog de Contra información


Recordando a John Magufuli, el difunto presidente de Tanzania que expuso la farsa del coronavirus

Publié par Contra información sur 14 Mai 2024, 16:34pm

Recordando a John Magufuli, el difunto presidente de Tanzania que expuso la farsa del coronavirus

El gobierno de Magufuli reveló cómo muestras extraídas de una papaya, una codorniz, una cabra y aceite de motor, entre otros, pueden generar un resultado positivo en la prueba de Covid-19!

El 3 de mayo de 2020, cuando la histeria mundial por el coronavirus alcanzó un punto álgido, el presidente de Tanzania, John Magufuli, anunció que sus agentes habían enviado en secreto muestras de animales, frutas e incluso aceite de motor al Laboratorio Nacional de Salud Pública (NPHL) para realizar pruebas.

Como era de esperar, muchas de estas muestras, que fueron etiquetadas en secreto como muestras tomadas de humanos (con nombres y datos personales falsos incluidos), habían dado positivo para Covid-19. Puedes ver la revelación televisiva condenatoria a continuación.

Pulse en el enlace para ver el video

Esta impactante revelación debería haber causado conmoción en toda la comunidad internacional. En cambio, las sorprendentes revelaciones fueron clínicamente cauterizadas y enterradas por los principales medios de comunicación. De hecho, cuando escuché por primera vez sobre este incidente, me resultó casi imposible encontrar un clip original verificable del anuncio televisado de Magufuli. Esto continuó durante casi dos o tres años. Los clips incriminatorios fueron eliminados tan pronto como aparecieron en línea o fueron prohibidos fuera del alcance del investigador casual.

Como resultado de estos impactantes resultados falsos positivos, que involucraban muestras específicas tomadas de una papaya, una codorniz y una cabra nada menos, Magufuli no sólo cuestionó la credibilidad de los científicos y el equipo de laboratorio del NPHL, sino que en la práctica estaba cuestionando también la legitimidad de la iniciativa global del Agitprop (propaganda y agitación) del coronavirus. (Años antes, el premio Nobel Kary Mullis había advertido sobre resultados de pruebas posiblemente dudosos basados en la técnica de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) que había desarrollado).

Las revelaciones de Magufuli llevaron al despido del máximo responsable de la NPHL, el Dr. Nyambura Moremi, y del gerente de control de calidad del laboratorio, Jacob Lusekelo, al día siguiente (4 de mayo de 2020). Hasta entonces, alrededor de 480 residentes en Tanzania supuestamente habían dado positivo por Covid-19. Quizás como parte de un ejercicio de limitación de daños, el Ministro de Salud de Tanzania, Ummy Mwalimu, encargó a un “comité especial de diez personas encabezado por el profesor Eligius Lyamuya para investigar la recolección de muestras de Covid-19 en el laboratorio”.

Se suponía que el comité, “compuesto por seis profesores universitarios y tres expertos de laboratorio, presentaría sus conclusiones en un plazo de 10 días. Los miembros del comité también incluyeron al profesor Said Aboud, el profesor Gabriel Shirima, el profesor Stephen Mshana, el profesor Rudovick Kazwala, el Dr. Thomas Marandu, el Dr. Mabula Kasubi, el Dr. Danstan Hipolite, Viola Msangi y Jaffer Sufi”.

Las conclusiones del comité nunca fueron publicadas. Después de la revelación de Magufuli, Tanzania abandonó rápidamente los esfuerzos por imitar las medidas de respuesta a la pandemia aplicadas en todo el mundo. A partir de entonces, el enfoque de Tanzania ante el Covid-19 fue similar al de Suecia, donde no se impusieron mascarillas ni vacunas, ni restricciones a las reuniones masivas. Sin embargo, no hemos oído hablar de víctimas masivas de Covid-19 en Tanzania.

Las sensacionales revelaciones de Tanzania, aunque censuradas en los principales medios de comunicación mundiales, sembraron sin embargo dudas en las mentes de los africanos. En consecuencia, gran parte del continente registró tasas de vacunación de un solo dígito hasta mediados de 2022, la última vez que Google publicó estadísticas nacionales de vacunación en todo el mundo. (Debería haber hecho una captura de pantalla, pero por desgracia).

De hecho, durante dos años y medio después del inicio de la “pandemia” global, no pude encontrar un solo videoclip que mostrara hospitalizaciones masivas en ningún lugar de África. Se podría pensar que un continente sumido en la pobreza extrema, la falta de servicios sanitarios y de servicios de salud sería diezmado por un contagio supuestamente mortal Pero nunca ocurrió, ni siquiera cuando se nos informaba de hospitales abarrotados, sistemas sanitarios sobrecargados y fábulas de médicos heroicos en otros lugares. ¿Recuerdan los famosos fracasos de Wuhan? (Más tarde se supo que muchos de estos informes y vídeos eran directamente falsos).

 

Posteriormente, Magufuli falleció en el cargo el 17 de marzo de 2021 y su deceso se atribuyó a una supuesta afección cardíaca de larga duración. Algunos medios de comunicación insinuaron, como era de esperar, que Magufuli había contraído y muerto de COVID-19. Los coronascépticos, por su parte, creen que fue asesinado.

En lugar de pruebas directas, busqué pruebas anecdóticas sobre el juego sucio. ¿Coincidió la muerte de Magufuli con un aumento de la ayuda extranjera a Tanzania? Los últimos datos verificables a este respecto estaban algo confusos desde mediados de 2021 en adelante, pero apuesto a que cientos de millones de dólares pueden haberse distribuido entre mediados de 2021 y mediados de 2024 a través de organismos multilaterales que se hacen pasar por cómplices de la agenda globalista.

Dr. Mathew Maavak

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