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Una escena de la película de 1981 Mi cena con André nos lo explica todo, nuestra futura condición humana bajo el sistema de la bestia, en términos que todo el mundo puede entender.
En esa película, uno de los personajes ofrece una perspectiva escalofriante del mundo desde su punto de vista en 1981 y hacia dónde veía que se dirigía. Resulta que, 42 años después, podemos decir con confianza que quienquiera que escribiera este guión acertó. De hecho, es tan exacto que cabe preguntarse si la CIA le dio esta parte del guión a Hollywood.
Echa un vistazo al clip de 3 minutos de Mi cena con André:
Uno de los mejores reposts que haré jamás. Las escenas más profundamente verdaderas de cualquier película jamás hecha. Es de principios de los 80. Justo a tiempo para 1984.
La escena anterior parece predecir una tecnocracia futura en la que los habitantes han perdido su humanidad inherente. Ya no son humanos sino transhumanos, una forma de seres híbridos que, a través de la tecnología, pueden ser condicionados para pensar y actuar del modo que exijan sus programadores, un pequeño grupo de élites globalistas.
El monólogo del personaje en el videoclip de arriba me recordó el comentario de Aldous Huxley en 1931 sobre "La dictadura perfecta" y cómo tendría la "apariencia de una democracia, pero sería básicamente una prisión sin muros", un estado esclavista dentro de cuyos muros los esclavos -mantenidos entretenidos, atontados y drogados- no pensarían en escapar. Confían implícitamente en su gobierno y en todas las figuras de autoridad. Cualquiera que cuestione la narrativa oficial es considerado demasiado temible y problemático. Deben ser aislados y apartados antes de que sus preguntas incómodas empiecen a extenderse a los demás y perturben la mente de colmena cuidadosamente cultivada.
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¿Eres un candidato para la nueva raza de transhumanos de la Humanidad 2.0? Si respondes afirmativamente a más de dos o tres de las siguientes preguntas, quizá quieras rellenar una solicitud y entregársela a Klaus Schwab en el Foro Económico Mundial.
*¿Tienes mucho cuidado de "pararte en la X"? Ya sabes, ¿esa pegatina en el suelo de tu tienda favorita de grandes superficies a la que se le permitió permanecer abierta durante el último confinamiento?
*¿Llevas cuando de lo ordenan tu material tóxico que causa cáncer, lo que te obliga a respirar tu propio dióxido de carbono nocivo?
*¿Te arremangas para ponerte una inyección recomendada por el médico y por los medios de comunicación a intervalos regulares durante el año?
*¿Crees que una educación universitaria sigue siendo necesaria para "salir adelante en la vida"?
*¿Tomas todos los medicamentos que te receta tu médico sin cuestionarte los efectos secundarios y sin realizar tu propia investigación independiente?
¿Pensarías alguna vez en alquilar un coche eléctrico enchufable como principal medio de transporte?
*¿Crees que el dinero en efectivo es "sucio", "con gérmenes" o "incómodo", algo que hay que evitar siempre que sea posible?
*¿Consideras que viajar al extranjero es un componente esencial de un estilo de vida feliz?
*¿Es necesario vivir en una ciudad para ser feliz?
*¿Crees que comer carne es peligroso para el medio ambiente?
*¿Prefieres comprar, rendir culto y entablar amistades por Internet en lugar de hacerlo en persona?
*¿Consideras que los controles de carretera, los dispositivos de seguimiento, los controles de identidad digitales, las cámaras de vigilancia y el reconocimiento facial son un aspecto normal e incluso beneficioso de la sociedad moderna?
Si has respondido afirmativamente a más de tres de las preguntas anteriores, quizá debas hacerte otra pregunta: ¿Podría no poseer nada y aprender a disfrutarlo si la tecnología atendiera todas mis necesidades?
Estas son las personas que cooperarán con su propia desaparición planificada de antemano. Se subirán a los autobuses y a los trenes sin cuestionarse el destino.
No se prepararán para tiempos difíciles. Para qué preocuparse, dicen, el gobierno nos cubrirá las espaldas si alguna vez las cosas se ponen tan mal como ustedes, los "catastrofistas", predicen.
Les recomendaría a estas personas que tomaran nota de lo ocurrido en Maui tras los terribles incendios del 8 de agosto. Tres semanas después, el gobierno estadounidense no aparece por ninguna parte. Mientras tanto, vayan a East Palestine, Ohio, y pregunten a sus habitantes cuánta ayuda recibieron del gobierno federal.
Mientras estamos en el tema de las películas proféticas, aquí hay otro clip favorito mío de la película de 2016 Amerigeddon.
Si eres una de estas personas, te imploro que despiertes. Nos espera un viaje salvaje en los próximos 12 a 15 meses, especialmente en Estados Unidos, donde nos dirigimos a otra de las últimas producciones teatrales conocidas como elecciones presidenciales. Escenarios sin precedentes tienden a desarrollarse durante estas dramáticas representaciones cada cuatro años. No dejemos que este espectáculo de marionetas nos distraiga de lo que realmente está sucediendo en los reinos físico y espiritual.
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