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Para luchar contra el mítico hombre del saco conocido como "cambio climático", el alcalde de Nueva York, Eric Adams, ha presentado un nuevo plan de vigilancia alimentaria que rastreará la "huella de carbono" de los neoyorquinos en función de los tipos y cantidades de alimentos que consuman.
Para lograr una reducción de las emisiones del 33% de aquí a 2030, Adams quiere seguir de cerca los hábitos de consumo de alimentos de los casi nueve millones de habitantes de su ciudad.
Adams anunció el plan esta semana junto con la Oficina del Alcalde para la Justicia Climática y Medioambiental, como parte del compromiso de la Gran Manzana de frenar en seco el "calentamiento global".
Durante el anuncio, la oficina publicó un gráfico con el inventario anual de gases de efecto invernadero de la ciudad de Nueva York, que supuestamente hace un seguimiento de la huella de carbono del consumo de alimentos de cada hogar.
Como era de esperar, el esquema apunta a la carne y los productos lácteos como "malos", categorizándolos como los que más contribuyen al calentamiento climático. La solución, nos dicen, es dejar de comer carne y lácteos y, en su lugar, consumir sustancias "vegetales" manipuladas genéticamente (OMG) en un laboratorio.
"Es fácil hablar de las emisiones procedentes de los vehículos y de cómo repercuten en nuestra huella de carbono", dijo Adams en el acto. "Pero ahora tenemos que hablar de la carne de vacuno".
American Express se asocia con NYC para declarar la guerra a la carne y los lácteos
En colaboración con C40 Cities, el laboratorio EcoData y el gigante financiero American Express, la Oficina del Alcalde para la Justicia Climática y Medioambiental elaboró el gráfico de emisiones a partir del cual Adams hizo sus declaraciones contra la carne y los productos lácteos.
Adams, vehemente partidario de todo lo basado en plantas, también anunció un nuevo sistema de seguimiento que gestionará Health + Hospitals, que es el nombre del sistema de sanidad pública de su ciudad.
Este rastreador controlará los hábitos y patrones de consumo alimentario de cada hogar neoyorquino y publicará los datos en el mismo sitio web donde se publican los datos sobre el inventario anual de fuentes de gases de efecto invernadero de la ciudad.
"La adición establece la contaminación por gases de efecto invernadero que implica la producción y el consumo de bienes, como las bebidas alcohólicas o la ropa, independientemente de que esos artículos se fabriquen o no en la ciudad de Nueva York", informó Gothamist.
"También examina las emisiones vinculadas a servicios muy contaminantes, como el transporte aéreo, y a contribuyentes menos conocidos, como la atención sanitaria".
Según Adams, una quinta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero de Nueva York procede de los alimentos que consumen los neoyorquinos. Adams afirma que es posible reducir esas emisiones comiendo menos carne y productos lácteos y más alimentos "Beyond Meat" et "Impossible Foods", esas emisiones pueden reducirse, sostiene Adams.
Esto es realmente una mala noticia para las personas que dependen de la carne y los lácteos para sus propias necesidades nutricionales. También es problemático para los diabéticos que, en lugar de tener acceso a grasas animales y carne para su sustento, se verán abocados a consumir alimentos azucarados como la fruta, que según Adams pueden sustituir a la carne y los lácteos.
Básicamente, Adams está asumiendo el papel de nutricionista de toda la ciudad, aunque no tenga licencia para ello, y a pesar de que nadie en Nueva York ha dado su consentimiento para que sea él quien dicte sus hábitos alimentarios.
No sé si la gente está realmente preparada para esta conversación", admitió Adams sobre el rechazo generalizado que se espera a medida que avanza en su agenda basada en plantas.
"El alcalde de Nueva York no tiene autoridad para imponer su dieta vegana u otras opciones de estilo de vida a los neoyorquinos, y punto", respondió alguien en los comentarios. "Ni hoy, ni después, ni siquiera dentro de cien mil años. Esta no es una función legítima del gobierno, y nunca lo será".
Las fuentes para este artículo incluyen:
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