El periodista Michael Ganoe ha visitado a menudo la valla fronteriza entre Gaza e Israel. Las bases militares israelíes están diseminadas por todo el territorio. ¿Y de verdad vamos a creer que los musulmanes pueden cruzar la frontera en camiones sin ser molestados y sin que intervenga el ejército?
"No puedo creerlo. Realmente no puedo hacerlo", dice Ganoe.
Ganoe señala que Israel tiene una unidad especial llamada Duvdevan. Está formada por judíos sefardíes que hablan árabe con fluidez. Se infiltran en la Franja de Gaza, se disfrazan de árabes y ponen fuera de combate a los insurgentes. ¿Cómo es que no sabían que algo así iba a ocurrir?
¿Y el Shabak, el FBI israelí? ¿O el Mossad? ¿Tampoco sabían nada? ¿Pueden introducir de contrabando en Irán a un judío sefardí que habla cinco idiomas, pero no tienen ni idea de lo que ocurre en su propia frontera? "Simplemente no puedo creerlo", repite Ganoe.
Está convencido de que el gobierno israelí permitió que esto sucediera. No puede ni quiere creer que se tratara de un ataque sorpresa.
Silvano Trotta