El legado de Barbara Marx Hubbard y la evolución consciente de las operaciones psicológicas

Publié par Contra información sur 7 Juillet 2025, 15:37pm

Tras tres años de investigación, John Klyczek ha completado la última entrega de su serie de investigación sobre el legado de Barbara Marx Hubbard. En este artículo, Klyczek revela cómo el evangelio maltusiano de Hubbard sobre la evolución transhumana consciente se ha visto impregnado de "magia sexual" manipulada por sectas vinculadas a las operaciones psicológicas y la inteligencia.

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La historia del movimiento de la Nueva Era está plagada de historias de sectas que han abusado sexualmente de iniciados con el pretexto de desarrollar su potencial humano, alcanzar la iluminación espiritual o desarrollar una conciencia superior. En muchos casos, se dice que estas supuestas sectas sexuales han estado involucradas con agencias de inteligencia, como la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos y el Mosad israelí. Consideremos los siguientes tres casos prácticos:

Se informó que el culto Finders, que fue investigado por tráfico sexual infantil y abuso ritual satánico, era una operación fachada de la CIA que se hacía pasar por una "red 'futurista" guiada por la psicología del “potencial humano”, la espiritualidad de la “Nueva Era” y el “misticismo oriental”.
Sectas de budistas tántricos tibetanos bajo los auspicios del Dalai Lama, quien sirvió como agente de la CIA durante mucho tiempo, han sido acusadas de abusar sexualmente de devotos a través de rituales tántricos realizados en los retiros de montaña New Age de Maurice Strong en Crestone, Colorado [1].
El culto NXIVM, que etiquetó a sus “esclavos sexuales” bajo el manto de sus programas de desarrollo del “potencial humano”, fue apoyado por miembros de la familia multimillonaria Bronfman, al menos uno de los cuales fue instrumental en la red más amplia de operaciones de tráfico sexual infantil de Jeffrey Epstein, quien evidentemente estaba vinculado con la CIA y el Mossad [2].

¿Son estas coincidencias entre los cultos sexuales de la Nueva Era y las agencias de inteligencia meras coincidencias? ¿O sugieren estos patrones la existencia de redes clandestinas de agentes de inteligencia que orquestan o se infiltran en los cultos de la Nueva Era para experimentar con rituales sexuales tántricos y otras formas de «magia sexual» como herramientas para operaciones psicológicas?

Sin duda, las coincidencias entre estos tres estudios de caso no son solo temáticas. Consideremos los curiosos denominadores comunes de la futurista de la Nueva Era, Barbara Marx Hubbard, y su evangelio maltusiano de la evolución transhumana consciente:

Hubbard nombró a la líder del culto NXIVM, Nancy Salzman, como “aliada” de su “cambio” de Nacimiento 2012 hacia el desarrollo sustentable maltusiano a través de la evolución transhumana consciente [3].
Hubbard también predicó su evangelio maltusiano de la evolución transhumana conciente en el puesto de avanzada de la Nueva Era de Strong para los gurús tántricos tibetanos en las montañas de Crestone [1] .
Los esfuerzos de Hubbard por promover la evolución consciente a través de sus conferencias de Convergencia Sinérgica, o SYNCON, también fueron respaldados por miembros del culto de los Finders [4].

Quizás la posición de Hubbard en la coyuntura de estos supuestos cultos sexuales sea casual. Sin embargo, el Tantra y otras formas de misticismo sexual se han entremezclado deliberadamente con la visión maltusiana de Hubbard de la evolución transhumana consciente. Hoy en día, su Fundación para la Evolución Consciente, financiada por Rockefeller, está dirigida por Marc Gafni, quien, a pesar de ser acusado de abusar sexualmente de dos menores de edad, está promoviendo una nueva interpretación de la evolución consciente a través del Tantra Evolutivo Integral y el Humanismo Cosmoerótico. Al igual que Hubbard, Gafni ha magnificado su versión "cosmoerótica" de la evolución tántrica consciente a través de exhibiciones públicas de "cocreación" con el Dalai Lama, quien también se reunió con NXIVM.

Mientras tanto, la visión maltusiana de Hubbard de la evolución transhumana consciente se ha llevado a cabo a través de la World Future Society, que cofundó con Edward Cornish, según se informa con la ayuda de "Game Caller" de los Finders[4], cuyo supuesto culto sexual fue implicado como una fachada de la CIA que operaba como una "red 'futurista" que proporcionaba servicios de "recopilación de información" por el precio de los "honorarios de los buscadores". De hecho, la World Future Society de Hubbard aparece como un "recurso de pronóstico..." junto con la CIA en un manual de Operaciones Psicológicas del Ejército de los EE. UU. (PSYOP) escrito por el teniente coronel Michael Aquino[5], quien fue investigado por abuso sexual infantil que involucraba rituales satánicos. Hubbard también cultivó la "cocreación" de la conciencia global con su compañero evolucionista, el teniente coronel Jim Channon[6], quien estableció el Primer Batallón Terrestre de soldados psíquicos de la Nueva Era del Ejército de los EE. UU .

Ya sea de manera fortuita o estratégica, Hubbard ocupó personalmente un nexo entre los cultos sexuales de la Nueva Era y las agencias de inteligencia, mientras que sus creencias maltusianas en la evolución transhumana consciente se han casado con el Tantra y otras modalidades de magia sexual practicadas por gurús y espías por igual. Rastreando los hilos que unen a Hubbard y su legado con estos cultos sexuales y agencias de inteligencia, este artículo final en mi serie "Barbara Marx Hubbard" examina si estos hilos están anclados a PSYOPs coordinadas destinadas a la ingeniería social de las culturas de la Nueva Era para creer en promesas futuristas de autorrealización colectivizada a través de la globalización tecnocrática y la evolución transhumana sostenible. Sin duda, como se expuso en entregas anteriores de esta serie, la fe evolutiva consciente de Hubbard ha sido proselitizada para generar nuevos valores culturales que son acordes con el transhumanismo y el desarrollo sostenible, que son el quid de la tecnocracia global emergente de la Cuarta Revolución Industrial (4IR).