Karl Marx y el latido del mal

Publié par Contra información sur 21 Mai 2025, 18:32pm

Hace trece años escribí una pieza bastante inusual titulada “La Tarea”, que posteriormente se incluyó en el libro Anticuerpos, Anarcangeles y Otros Ensayos. [1]

En realidad, no fue tanto un ensayo como un flujo de conciencia, una expresión escrita de algo que estaba sucediendo dentro de mi cabeza.

Es un llamado a mi yo de 2012, emitido por una voz misteriosa desde el más allá, para que tenga el coraje de buscar la verdad, psicológica y políticamente, para ir “al corazón mismo de aquello que nos oprime ”.

Debajo del parlamento, las ratas; debajo del hospital, la plaga; todo sellado en catacumbas de cadáveres y huesos siniestros.

Debajo de los bancos, de los talleres clandestinos; debajo de las escuelas, de las cárceles; debajo de los centros comerciales y de sus engaños iluminados con neón, hierve un pozo de desechos tóxicos.

La voz advierte contra “esos falsos profetas que bloquean el camino a otros con verdadero propósito ” y aconseja:

No pierdas el tiempo aquí, te digo: obedece a tu corazón y sigue adelante y hacia abajo.

Que la desobediencia sea vuestro código, tal como se expresa en cada uno de vuestros pasos, como la servidumbre lo es en los de los demás.

No sólo hay que desafiar las órdenes, sino también las sutiles artimañas que te desvían del camino y te conducen a arenas movedizas.

¡Ve a través de las mentiras! ¡Adquiere el hábito del rechazo y la resistencia!

Describe cómo con esta determinación y una falta de

cobardía egoísta o autoconservadora, finalmente se alcanzará el núcleo del asunto.

Deslízate entre los puños agitados y las artimañas despiadadas, ábrete paso entre las turbas linchadoras y las bandas de ladrones cuyos hijos son señores.

Baja por las escaleras que se convierten en escombros y conducen a una cueva rancia, fría y silenciosa.

Ponte de rodillas y raspa el suelo ennegrecido que hay debajo.

Las uñas rotas no son excusa: cava con más fuerza con esas delicadas manos y destroza este pastel de mierda.

Más rápido, más lejos, hasta que por fin llegas al núcleo, a la cosa misma que está debajo de todo.

Toca la piel de nuez de este enorme quiste, de este cáncer endurecido por el peso del tiempo.

Mantén la mano sobre su caparazón y siente su latido maligno. Y luego prepárate para lo que tienes que hacer.

Mirando hacia atrás, siento que he pasado por algo parecido al viaje que imaginé en aquel entonces.

Este ha sido particularmente el caso desde 2020, por supuesto, cuando los disidentes tuvimos que encontrar recursos internos profundos para mantenernos cuerdos y continuar expresando la verdad tal como la conocíamos.

Al investigar la entidad responsable del golpe de Covid, he sido consciente de haber atravesado capa tras capa de ilusión y manipulación para acercarme a una comprensión clara.

La última fase de esto me ha llevado a identificar al enemigo de la humanidad como ZIM, la mafia sionista-imperialista, una postura que inevitablemente ha desatado una nueva oleada de insultos, tanto en la vida real como en línea. [2]

Dada mi asociación política de 30 años con personas

consideradas como de “izquierda” (aunque nunca acepté esa etiqueta), también he perdido apoyo en algunos sectores ( y lo he ganado en otros ) al exponer hasta qué punto la “izquierda” contemporánea es una herramienta del sistema y que el comunismo soviético fue financiado por ZIM. [3]

Otra conclusión que me resultó difícil expresar, porque me llevaba fuera de mi rango habitual de lenguaje, fue que hay algo “malvado más allá de las palabras” en la criminocracia global. [4]

Me he dado cuenta de que todo el sufrimiento, la muerte y la destrucción causados por sus guerras, sus genocidios, su terrorismo de falsa bandera, su “desarrollo” industrial, sus redes de abuso infantil, sus productos farmacéuticos tóxicos y su totalitarismo negador de la libertad no son sólo daños colaterales en su búsqueda de ganancias y poder.

La pandilla global en realidad hace el mal por el mero hecho de hacerlo y se deleita en sus propias actividades obscenas.

Me di cuenta de que esto lo convierte en algo más que una criminocracia, y que sería mejor llamarlo una democracia. [5]

En vista de mis conclusiones sobre el comunismo y la naturaleza satánica de la entidad detrás de él (¡ y mucho más! ), naturalmente me sentí intrigado cuando un corresponsal me envió un PDF de un libro de 1986 titulado Marx y Satanás del escritor cristiano estadounidense Richard Wurmbrand. [6]

Aunque no comparto de ninguna manera todas las actitudes sociales, políticas y religiosas del autor, él proporciona información y análisis interesantes.

La primera tarea de Wurmbrand es demoler cualquier impresión que pudiéramos haber tenido de que Karl Marx era una persona decente, motivada por una elevada preocupación por los trabajadores del mundo.

Así describe Marx como un hombre absolutamente desagradable, malhumorado y egoísta… ¡y, peor aún, un espía de la policía!

“El periódico alemán Reichsruf (9 de enero de 1960) publicó el hecho de que el canciller austríaco Raabe donó a Nikita Khrushchev, entonces director de la Rusia Soviética, una carta original de Karl Marx.

“A Jruschov no le gustó, porque era una prueba de que Marx había sido un informante pagado de la policía austríaca, espiando a los revolucionarios.

La carta se había encontrado accidentalmente en un archivo secreto. Indicaba que Marx, como informante, había informado sobre sus camaradas durante su exilio en Londres. [7]

Un elemento clave en la identificación que hace

Wurmbrand de las afiliaciones satánicas de Marx es la cita de algunos de sus escritos juveniles.

Debo admitir que esto no es del todo justo para el hombre maduro: después de todo, ¿quién de nosotros querría hoy ser juzgado por lo que dijo o escribía cuando tenía 18 años?

Pero hay, sin embargo, algo sorprendente en su repentino cambio de una fe cristiana a una postura airada que no era tanto atea como opuesta a un Dios cuya existencia todavía reconocía.

Por ejemplo, Marx declaró en un poema: “Quiero vengarme de Aquel que gobierna arriba”. [8]

Y en su obra Oulanem escribió: «El reloj se ha detenido, la casa pigmea se ha derrumbado. Pronto abrazaré la eternidad en mi pecho, y pronto aullaré gigantescas maldiciones contra la humanidad». [9]

¡Ciertamente lo hizo!

Wurmbrand también cita una extraña confesión que Marx hizo en un poema llamado "El jugador", que luego fue minimizada tanto por él mismo como por sus seguidores:

Los vapores infernales suben y llenan mi cerebro,
hasta que enloquezco y mi corazón cambia por completo.

¿Ves esta espada?

El príncipe de las tinieblas
me la vendió.
Para mí, él marca el ritmo y da las señales.
Cada vez con más audacia interpreto la danza de la muerte . [10]

Wurmbrand añade: “Estas líneas adquieren un significado especial cuando nos enteramos de que en los ritos de iniciación superior del culto satanista se vende al candidato una espada “encantada” que asegura el éxito.

“Lo paga firmando un pacto, con sangre extraída de sus muñecas, acordando que su alma pertenecerá a Satanás después de la muerte”. [11]

Ahora empezamos a comprender qué le ha sucedido al joven Marx. Tenía convicciones cristianas, pero no había llevado una vida coherente.

“Su correspondencia con su padre da testimonio de su despilfarro de grandes sumas de dinero en placeres y de sus constantes disputas con la autoridad paterna sobre este y otros asuntos.

“Entonces parece haber adoptado los principios de la iglesia satanista altamente secreta y haber recibido los ritos de iniciación”. [12]

En otro poema, Marx (en la foto ) escribió:

Así que he perdido el cielo,

lo sé muy bien.

Mi alma, una vez fiel a Dios,

está elegida para el infierno. [13]

¿Por qué Marx habría pensado que estaba destinado al infierno, si en realidad era el campeón idealista del pueblo, como lo presentan sus seguidores?

Wurmbrand sostiene: “No tenía ninguna visión de servir a la humanidad, al proletariado o al socialismo.

“Él sólo quería arruinar el mundo, construir para sí un trono cuyo baluarte sería el miedo humano”. [14]

Aunque el propio Wurmbrand admite que esta evidencia literaria de una afiliación satánica podría considerarse meramente “circunstancial”, [15] su tesis está respaldada por la realidad de la agenda política de Marx.

Esto incluía una defensa de la esclavitud en los EE.UU., revelada en una carta a Pierre-Joseph Proudhon, quien adoptó la postura opuesta.

Marx escribió: “Sin esclavitud, América del Norte, el más progresista de los países, se transformaría en un país patriarcal.

Si borras a Norteamérica del mapa mundial, tendrás anarquía: la decadencia total del comercio y la civilización modernos. Si aboles la esclavitud, habrás borrado a América del mapa de las naciones. [16]

¡Oh, no! ¡No a la decadencia total del comercio moderno! ¡Qué pesadilla para cualquier ícono anticapitalista!

Esta reacción extrañamente insensible de Marx tampoco fue un hecho aislado.

Wurmbrand escribe: «Marx solo escribió sobre la tortura una vez en toda su obra. Durante su vida, muchos de sus seguidores fueron torturados por las autoridades zaristas rusas.

Dado que Marx suele ser descrito como humanista, cabría esperar que escribiera con horror sobre una práctica tan abominable. Pero su único comentario fue: «La tortura por sí sola ha dado lugar a los inventos mecánicos más ingeniosos y ha empleado a muchos artesanos honorables en la producción de los instrumentos». [17]

Esta negativa a adoptar una oposición ética a la esclavitud o la tortura estaba profundamente arraigada en la ideología comunista formulada por Marx y Friedrich Engels.

Como escribieron: “El comunismo suprime las verdades eternas, suprime toda religión y toda moralidad”. [18]

Estoy muy de acuerdo con Wurmbrand en que el marxismo representa una reducción de la humanidad al nivel de unidades económicas productivas, al capital humano, y un intento de abolir la moralidad natural que debería impedir el avance de la esclavitud, la tortura, el “comercio moderno” y el campo de prisioneros totalitario global al que esto pretende en última instancia conducirnos.

Explica: “El marxismo es la primera filosofía sistemática y detallada que reduce drásticamente la noción del hombre.

Según Marx, el hombre es, ante todo, un vientre que debe llenarse y rellenarse constantemente. Los intereses predominantes del hombre son de naturaleza económica; produce para satisfacer sus necesidades. Para ello, establece relaciones sociales con otros.

Esta es la base de la sociedad, lo que Marx llama la infraestructura. El matrimonio, el amor, el arte, la ciencia, la religión, la filosofía, todo lo que no sean las necesidades del vientre, es superestructura, determinada en última instancia por el estado del vientre. [19]

Wurmbrand refuerza su afirmación de que existe una conexión entre el comunismo y el satanismo con algunos datos interesantes.

Por ejemplo: “Anatole France, un reconocido escritor comunista francés, introdujo el comunismo a algunos de los más grandes intelectuales de Francia.

En una reciente exposición de arte demoníaco en París, una de las piezas exhibidas fue la silla que usaba ese escritor comunista para presidir rituales satánicos. Sus reposabrazos y patas con cuernos estaban cubiertos de piel de cabra. [20]

Wurmbrand también identifica la naturaleza gratuitamente sanguinaria del régimen comunista soviético como un fuerte indicador de influencia satánica.

Afirma: “Matar enemigos políticos, hacer la guerra y promover revoluciones –incluso con asesinatos en masa– demuestra la pecaminosidad humana.

“Pero los comunistas rusos, después de haber matado a millones de sus enemigos, volvieron su violencia incluso contra sus amigos, incluidos sus más ilustres camaradas, los principales perpetradores de su revolución.

Este es el sello del satanismo. Es la revolución no para alcanzar un fin, sino la revolución y matar por matar, lo que Marx llamó 'la revolución permanente'. [21]

Para ofrecer una idea de la mentalidad satánica, Wurmbrand proporciona algunos extractos de los escritos de Aleister Crowley, el notorio promotor británico de la magia negra.

No tengas compasión de los caídos. Nunca los conocí. No consuelo. Odio al que consuela y al que es consolado . [22]

¡Bella eres, oh Babilonia, y deseable! ¡Oh Babilonia, Babilonia, madre poderosa, que cabalgas sobre bestias coronadas, deja que me embriague con el vino de tu fornicación; deja que tus besos me desenfrenen hasta la muerte ! [23]

La mención de Crowley me recuerda algunos detalles fascinantes del libro de Jim Macgregor y John O'Dowd de 2025, Dos guerras mundiales y Hitler, que no logré incluir en mi ya extensa reseña. [24]

Informan sobre evidencia que ha sido descubierta para demostrar que Crowley estuvo involucrado en el complot para que Alemania hundiera el Lusitania y así cambiar la opinión pública estadounidense hasta el punto de permitir que Estados Unidos entrara en la Primera Guerra Mundial, uno de los baños de sangre que cada vez sospecho más que sirven como sacrificios rituales satánicos, además de promover una agenda a largo plazo. [25]

Crowley había conseguido anteriormente su lugar en la Universidad de Cambridge gracias al amigo de su madre, Robert Cecil, marqués de Salisbury, tres veces primer ministro británico y cercano a la sociedad secreta Rhodes-Milner, vinculada a los Rothschild, que estaba en el núcleo de la mafia sionista-imperialista en Londres.

Cuando Crowley llegó a Nueva York trabajó estrechamente con Otto Kahn, del banco Kuhn, Loeb & Co, una fachada de los Rothschild en la que un socio general, desde 1929 hasta 1960, iba a ser el jefe de la inteligencia británica/ZIM en los EE. UU., Sir William Wiseman. [26]

Kahn, dicen Macgregor y O'Dowd, era “cercano tanto a la inteligencia británica como a JP Morgan Jr.” [27] y el investigador Steve Jackson cree que el propio Crowley recibió patrocinio para su trabajo de inteligencia de JP Morgan, “el principal agente financiero del gobierno británico en los EE. UU.” [28] y, de hecho, la principal fachada estadounidense de los Rothschild.

La empresa sigue en el centro del eje globalista del mal y el 14 de mayo de 2025 sus oficinas de Londres fueron atacadas por activistas de Palestine Action debido a su complicidad en el genocidio en curso de ZIM en Gaza. [29]

El papel de Crowley para la inteligencia británica/ZIM era hacerse pasar por un oponente irlandés del imperialismo británico que simpatizaba con Alemania.

Como tal, se infiltró con éxito en una célula de inteligencia y propaganda alemana que operaba en Nueva York, e incluso llegó a codearse con importantes diplomáticos alemanes como Franz von Papen, quien más tarde se convertiría en vicecanciller de Alemania bajo el gobierno de Hitler.

Los autores escoceses lo explican: “Muy consciente de que el Lusitania estaba eludiendo el bloqueo de los submarinos al transportar municiones estadounidenses en cada viaje de regreso a Liverpool, la tarea de Crowley no era tratar de ocultar ese hecho a la unidad de inteligencia alemana en Nueva York, sino revelarlo”. [30]

Uno de los amigos y compañeros agentes de Crowley fue Ernst “Putzi” Hanfstaengl, el hombre que preparó a Adolf Hitler y ayudó a provocar otro baño de sangre diabólico: la Segunda Guerra Mundial. [31]

Parece que conoció a Hanfstaengl gracias a Frank Harris, quien, al igual que Hanfstaengl, era amigo de Winston Churchill. [32]

El propio Crowley operó como espía británico en Alemania entre 1930 y 1932, como lo describe Tobias Churton en su libro “ La Bestia de Berlín ”. [33]

ZIM ha hecho todos los esfuerzos posibles para relegar al olvido la participación de Crowley, el adorador del diablo, en sus actividades belicistas.

El profesor Richard B. Spence escribe en un artículo sobre el hombre al que llama “Agente Secreto 666”: “En algún lugar de los archivos aún secuestrados del MI6 o el MI5 puede encontrarse la historia completa de las aventuras de la Gran Bestia en la Primera Guerra Mundial.

Algunas de sus huellas persisten en el índice de correspondencia del Ministerio de Asuntos Exteriores anterior a 1920, pero todos estos archivos, incluido uno centrado en sus campañas de propaganda antibritánica, fueron eliminados del dominio público hace mucho tiempo. Es improbable que una expurgación tan exhaustiva haya sido accidental. [34]

Volviendo a Marx, Wurmbrand echa un vistazo a Moses Hess ( en la foto ), “el hombre que jugó el papel más importante en su vida, el hombre que lo llevó a abrazar el ideal socialista”. [35]

Hess lo anunció así: «El Dr. Marx, mi ídolo, quien dará el golpe final a la religión y la política medievales». [36]

Una vez más vemos cómo avanza la agenda criminocrática del “cambio”: eliminar la comunidad orgánica “medieval”, basada en la ética y las costumbres tradicionales, para imponer un nuevo orden mundial frío, mecanicista y totalitario bajo la falsa bandera de mejorar la vida de las personas.

Cabe señalar que en los archivos del Instituto Internacional de Historia Social (IISH) de Ámsterdam se encuentra correspondencia de varios años entre Hess y un tal JJ Speyer, identificado como el «secretario privado del barón Carl von Rothschild». [37]

El propio Karl Marx estaba ciertamente relacionado con los Rothschild [38] y algunos afirman que fue empleado por ellos, aunque todavía no he visto evidencia sólida de tal efecto. [39]

A Hess se le atribuye haber convertido a Marx y Engels al comunismo, y su lápida lo declara el «fundador del Partido Socialdemócrata Alemán». [40]

Esta lápida se encuentra en Israel porque en 1961 su cuerpo fue exhumado de su lugar de descanso original en Colonia y trasladado allí.

Lo curioso es que Hess también era sionista; curioso porque este sistema de creencias no encaja bien con el comunismo tal como nos lo presentan.

Wurmbrand señala: «Hess es un internacionalista con una diferencia: el patriotismo judío debe permanecer». [41]

“El patriotismo judío de un socialista revolucionario que niega el patriotismo de todas las demás naciones es altamente sospechoso”. [42]

El propio Hess declaró: «El “nuevo” judío, que niega la existencia de la nacionalidad judía, no sólo es un desertor en el sentido religioso, sino también un traidor a su pueblo, a su raza e incluso a su familia.

Si fuera cierto que la emancipación judía en el exilio es incompatible con la nacionalidad judía, entonces sería deber de los judíos sacrificar la primera en nombre de la segunda.

“Este punto, sin embargo, puede requerir una explicación más elaborada, pero que el judío debe ser ante todo un patriota judío no necesita prueba para aquellos que han recibido una educación judía”. [43]

De manera bastante notable, también insistió: “La lucha racial es la principal, y la lucha de clases es secundaria”. [44]

Verifiqué dos veces estas citas en una versión archivada

en línea de su libro Roma y Jerusalén: Un estudio sobre el nacionalismo judío. ¡Tan extraordinaria es esta postura de un supuesto socialista internacional!

En un giro adicional, el hombre que encargó a su ídolo Marx la tarea de acabar con la “religión medieval”, escribió: “Siempre me exaltaron las oraciones hebreas… Son realmente una expresión del espíritu judío colectivo; no abogan por el individuo, sino por toda la raza judía”. [45]

Wurmbrand acusa a Hess de haber inventado “un tipo específico de sionismo… un sionismo distorsionado, un sionismo de lucha racial” que, desde su perspectiva de los años 1980, imagina que ha sido superado. [46]

Afirma que en la forma moderna del sionismo “no ha quedado rastro alguno de satanismo”. [47]

Pero si hubiera presenciado el ataque demoníaco de hoy contra el pueblo de Gaza, y hubiera escuchado el absoluto desprecio por las vidas palestinas expresado por los sionistas en todas partes, seguramente no habría mantenido esa opinión.

Una observación interesante de Wurmbrand es que el satanismo opera de manera clandestina por medio de fachadas, una técnica que, según él, también suelen utilizar los comunistas y, yo añadiría, el imperio empresarial rothschildiano. [48]

Él sugiere que tanto el comunismo como el nazismo, junto con la variedad tóxica del sionismo que él creía extinta, son de hecho fachadas satanistas.

Cuando se considera la muerte y el sufrimiento que han desatado, junto con el hecho de que se puede demostrar que la misma entidad se esconde detrás de todos ellos, ciertamente parece posible .

Si a esto le sumamos a Jeffrey Epstein y su operación de chantaje sexual infantil de la inteligencia israelí, junto con el abuso ritual general, la tortura y el asesinato de niños por parte de redes pedófilas globales que involucran a banqueros y políticos, [49] más detalles reveladores como la notoria fotografía de Jacob Rothschild y Marina Abramovic posando frente a un retrato de "Satanás convocando a sus legiones", entonces incluso comienza a sonar probable.

Y encaja demasiado bien con la agenda de despoblación, las inyecciones y aerosoles tóxicos, el objetivo de reducir el dióxido de carbono que da vida a “cero”, la negación de nuestra realidad corporal, los planes para abolir la maternidad, [50] el intento transhumanista de cambiar “lo que significa ser humano”, la promoción de la pornografía vil y los cultos del abuso de drogas y la violencia, sin hablar del brutal ataque al mundo natural, a las formas de vida tradicionales y saludables, a la paz, la libertad y la justicia.

No es sólo Karl Marx sino toda la mafia globalista la que continuamente aúlla “gigantescas maldiciones sobre la humanidad”.

Entonces, uno podría preguntarse: ¿ZIM está alimentado por algo incluso más oscuro que la supremacía judía asesina?

¿Qué es exactamente lo que estamos viendo aquí?

Me temo que no tengo todas las respuestas, pero tengo la sensación de que, con todo esto, estamos muy cerca del “latido maligno” del cáncer global sobre el que escribí una vez.

Y creo que ahora es el momento de que todos escuchemos la voz que describí entonces:

¡Enfócate con nitidez y atraviesa su espesor con tu

verdad cortante!

¡Provoca una resonancia a tu alrededor y sacude su propia estructura con un ritmo que revuelve!

¡Lánzate con todo tu ser a la destrucción de la bestia!

¡Desgarrate por dentro y arroja tus huesos y carne con furia y desesperación!

Entonces, justo cuando ya no puedes hacer más, un rayo, conjurado, irrumpe en el callo y –¡mira!– lo abre y lo destroza.

¡Un géiser de pus apestoso!

¡Una erupción de bilis negra y sanguinolenta!

Y luego un estruendo por todos lados mientras aparecen grietas desde abajo.

¡Brotan los brotes verdes!

Zarcillos y hojas y árboles jóvenes y ramas y luego poderosos robles se alzan estrellándose a través del suelo destrozado y crecen, crecen hacia arriba, abriéndose paso a través de los pisos superiores mientras los escombros caen.

Desbloqueado, desencadenado, ¡un caos de renovación mientras la vida negada irrumpe con energía desatada!

[1] https://network23.org/paulcudenec/2012/02/05/the-task/
https://winteroak.org.uk/wp-content/uploads/2021/04/antibodies-and-anarchangelsweb.pdf
[2] https://winteroak.org.uk/2025/04/14/ignore-the-gaslighting-zim-is-real/
https://winteroak.org.uk/2025/05/13/london-a-most-controversial-conference/
[3]
https://winteroak.org.uk/2021/02/10/controlling-the-left-the-impact-edgenda/
https://winteroak.org.uk/wp-content/uploads/2024/03/the-false-red-flag–1.pdf
https://winteroak.org.uk/2025/03/31/communism-and-industrial-imperialism/
[4] https://winteroak.org.uk/2024/06/13/evil-beyond-words/
[5] https://winteroak.org.uk/2024/11/19/the-acorn-98/#1
[6] Richard Wurmbrand, Marx and Satan (Westchester, Illinois: Crossway Books, 1986). Thanks Peter!
[7] Wurmbrand, p. 33.
[8] Karl Marx, ‘Des Verzweiflenden Gebet’ (‘Invocation of One in Despair’), Karl Marx and Friedrich Engels, Historisch-kritisch Gesamtausgabe. Werke, Schrijten, Briefe (Complete Historical Critical Edition. Works, Writings, Letters), on behalf of the Marx-Engels Institute, Moscow, published by David Rjazanov (Frankfurt-am-Main: Marx-Engels Archiv, 1927), I, i (2), p. 30, cit. Wurmbrand, p. 12.
[9] Karl Marx, Oulanem, Act 1, Scene 3, p. 68, cit. Wurmbrand, p. 16.
[10] Karl Marx, ‘Spielmann’ (‘The Player’), cit. Deutsche Tagespost, West Germany, December 31, 1982, pp. 57-58, cit. Wurmbrand, p. 15.
[11] Wurmbrand, p. 15.
[12] Wurmbrand, pp. 17-18.
[13] Karl Marx, ‘Das Bleiche Madchen’ (‘The Pale
Maiden’), Marx-Engels-Werke, XXX, pp. 55-57, cit. Wurmbrand, p. 22.
[14] Wurmbrand, p. 20.
[15] Wurmbrand, p. 108.
[16] Quoted by Nathaniel Weyl, Karl Marx: Racist (New Rochelle, NY: Arlington House), cit. Wurmbrand, p. 44.
[17] Karl Marx, Theories of Surplus Value, p. 375. cit. Wurmbrand, pp. 75-76.
[18] Karl Marx and Friedrich Engels, Selected Works (London: Lawrence and Wishart, 1958), p. 52, cit. Wurmbrand, p. 41.
[19] Wurmbrand, p. 83.
[20] Express, Paris, October 6, 1979, cit. Wurmbrand, p. 56.
[21] Wurmbrand, pp. 64-65.
[22] Alister Crowley, The Book of Thoth (Berkeley: Koshmarin Press, 1904), p. 97, cit. Wurmbrand, p. 66.
[23] Ibid., p. 137, cit. Wurmbrand, p. 66.
[24] https://winteroak.org.uk/2025/05/08/adolf-hitler-and-the-zio-imperialist-mafia/
[25] Dr Jim Macgregor & Dr John O’Dowd, Two World Wars and Hitler: Who Was Responsible? Anglo-American Money, Foreign Agents and Geopolitics (Walterville, Oregon: Tine Day, 2025), p. 281.
[26]https://en.wikipedia.org/wiki/Sir_William_Wiseman,_10th_Baronet
[27] Macgregor and O’Dowd, p. 282.
[28] https://www.toutfait.com/belle-da-costa-greene-a-biographical-sketch-of-a-friend-acquaintance-of-aleister-crowley/
[29] https://www.thecanary.co/uk/news/2025/05/16/palestine-action-jp-morgan/
[30] Macgregor and O’Dowd, p. 283.
[31] Macgregor and O’Dowd, p. 282.
[32] Macgregor and O’Dowd, p. 471.
[33] Tobias Churton, Aleister Crowley: The Beast in Berlin: Art, Sex, and Magick in the Weimar Republic (Vermont: Inner Traditions, 2014) p. 2, cit. Macgregor and O’Dowd, p. 436.
[34] Richard B Spence, ‘Secret Agent 666: Aleister Crowley and British Intelligence in America, 1914-1918’, International Journal of Intelligence and Counterintelligence, 13: 359-371, 2000, p. 360. https://archive.org/details/secret-agent-666-spence-crowley/page/360/mode/2up
[35] Wurmbrand, p. 24.
[36] Moses Hess, letter of September 2, 1841 to Berthold Auerbach, Marx-Engels-Werke, I, i (2), p. 261, cit. Wurmbrand, p. 24.
[37]https://web.archive.org/web/20131024031931/http://www.iisg.nl/archives/nl/files/h/ARCH00568full.php
[38] https://archives.balliol.ox.ac.uk/Modern%20Papers/gelles/2018RothschildMarx.pdf
[39] https://tinyurl.com/355tnta4
[40] Wurmbrand, p. 87.
[41] Wurmbrand, p. 89.
[42] Wurmbrand, p. 90.
[43] Moses Hess, Rome and Jerusalem: A Study in Jewish Nationalism, trans. Mayer Waxman (New York: New York Block Publishing Company, 1918), pp. 62-63. https://archive.org/details/romeandjerusale02waxmgoog/page/n64/mode/2up
[44] Hess, p. 226. https://archive.org/details/romeandjerusale02waxmgoog/page/n228/mode/2up
[45] Hess, p. 62. https://archive.org/details/romeandjerusale02waxmgoog/page/n64/mode/2up
[46] Wurmbrand, p. 88.
[47] Wurmbrand, p. 90.
[48] Wurmbrand, p. 95.
[49] https://winteroak.org.uk/2024/06/13/evil-beyond-words/
[50] https://winteroak.org.uk/2024/07/22/truth-reality-tradition-and-freedom-our-resistance-to-the-great-uprooting/