La teoría del “pedófilo adorador de Satanás”

Publié par Contra información sur 16 Décembre 2024, 13:40pm

En Occidente, nos sentimos guiados por personas que quieren hacernos daño. No podemos creer que sean simplemente incompetentes o equivocados, que intenten hacer el bien pero que hagan daño sin querer, simplemente porque tienen la ideología equivocada. Es algo más grave que eso. Nuestra intuición más profunda es que quieren esclavizarnos, deshumanizarnos, destruirnos espiritual, psicológica, social e incluso biológica y genéticamente.

Pero ¿quiénes son? ¿Y por qué nos odian?

¿Estamos tratando con psicópatas? Un grupo de psicópatas no puede formar un cuerpo unificado. Los psicópatas intentarán matarse entre sí, como cangrejos en una canasta. Incluso un solo psicópata en una banda criminal hace que el negocio sea imposible, como descubre el Sr. White (Harvey Keitel) en Reservoir Dogs.

Por lo tanto, pensamos que estas personas no son solo psicópatas individuales. Deben ser parte de una sociedad secreta malvada. Eyes Wide Shut los muestra teniendo orgías con mujeres, pero en realidad seguramente lo hacen con niñas y niños menores de edad, tal vez niños y bebés.

¿Realmente adoran a Satanás? Alex Jones nos asegura que cada verano en Bohemian Grove adoran al dios cananeo Baal o Moloch, que no es otro que el diablo (pues todos los dioses, excepto Yahvé, son demonios).

Recordamos un antiguo rumor católico según el cual los masones adoran a Satanás. En 1890, el escritor anticlerical francés Léo Taxil jugó una mala pasada a los católicos antimasónicos al anunciar su conversión y denunciar las prácticas satánicas de los masones. El Papa León XIII le concedió una audiencia, pero en 1897 reveló que su conversión había sido fingida y que su objetivo era parodiar y ridiculizar el fanatismo antimasónico católico. Sin embargo, muchos católicos todavía suponen que debe haber algo de verdad en ese rumor.

Ahora tenemos un panorama coherente: “El gobierno, los medios de comunicación y el mundo financiero de Estados Unidos están controlados por un grupo de pedófilos adoradores de Satanás que dirigen una operación mundial de tráfico sexual infantil”. Eso es lo que cree el 15 por ciento de los estadounidenses, según una encuesta de marzo de 2021 del Public Religion Research Institute.

Siguen surgiendo testimonios que confirman esa gran teoría de la conspiración. Patrick Bet-David entrevistó recientemente a Anneke Lucas , quien afirmó haber sido programada como esclava sexual por MK-Ultra desde los seis años y vendida a David Rockefeller durante la reunión de Bilderberg de 1972. Ella lo recordó en psicoterapia, como la mayoría de las otras mujeres de mediana edad que testifican en un nuevo documental titulado Les Survivantes.

He estado dedicando mucho tiempo últimamente a intentar desacreditar esta película, que está provocando un pequeño pánico satánico en la parte francófona de Conspiracyland. Sin éxito. La gente cree lo que quiere creer. Y por alguna razón, mucha gente quiere creer que el mundo es un desastre debido a los pedófilos adoradores de Satanás. Tiene mucho sentido: nos odian, y el odio a la humanidad proviene de Satanás, así que deben ser adoradores de Satanás, y ¿qué podría ser más satánico que violar y asesinar niños?

Qué genios fueron los que estuvieron detrás de la operación psicológica de QAnon para crear esta imagen aprovechando nuestro viejo inconsciente colectivo religioso. Ya ni siquiera necesitan fingir ser racionales. Hace apenas unas semanas, Ryan Matta, con la armadura de Dios, explicó en su nueva película Operation Amber Alert: “El gobierno de Estados Unidos ha sido secuestrado por una red de pedófilos de élite tan arraigada que prácticamente son el papel tapiz del Congreso, el Senado, la Casa Blanca y todas las agencias de tres letras que pueda nombrar”. La prueba es que las autoridades federales han perdido la pista de 437.103 migrantes menores de edad (la cifra de Matta) bajo la administración Biden. ¿Dónde más podrían estar estos menores, si no en redes de sexo dirigidas por demócratas satánicos en asociación con los cárteles mexicanos?

Me siento como Nick Fuentes: esto se está volviendo un poco extraño para mí.

Estoy cansado de oír hablar de Satanás y de intentar decirle a la gente: ¡no es Satanás, es Yahvé! Los psicópatas adoradores de Yahvé, no los pedófilos adoradores de Satanás, están matando y matando de hambre a cientos de miles de niños. Los psicópatas adoradores de Yahvé, no los pedófilos adoradores de Satanás, han secuestrado a Estados Unidos.

Y nos odian. Hay dos tipos de judíos en este mundo: los que aman a Israel más de lo que odian a las naciones cristianas, y los que odian más a las naciones cristianas. En Estados Unidos, los primeros votaron por Trump y los segundos por Harris.

La teoría de los “psicópatas adoradores de Yahvé”

Debemos aprender de los griegos y los romanos. Ellos no tenían necesidad de Satanás. Casi unánimemente, solían pensar que el odio a la humanidad era un rasgo común de los judíos (léase Peter Schäfer, Judeophobia: Attitudes Toward the Jews in the Ancient World, Harvard UP, 1998). Tácito señaló en el siglo I d.C. que siempre están dispuestos a ayudarse mutuamente, pero “consideran al resto de la humanidad con todo el odio de los enemigos”. En un edicto emitido por el emperador Claudio en el año 41 d.C., se compara a los judíos con “una enfermedad pública” que infecta a todo el mundo romano ( oikoumene ). Isidoro, el jefe de una delegación de griegos alejandrinos que habían ido a Roma, se quejó al emperador de que los judíos “están conspirando para sumir al mundo entero en un estado de agitación”.

Apión, otro griego de Alejandría, escribió un best-seller contra los judíos, que se ha perdido pero que se conoce en parte gracias a su refutación por el historiador judío Flavio Josefo ( Contra Apión ); Apión afirmaba que los judíos adoraban una cabeza de asno de oro en su templo. El rumor procedía de la creencia egipcia, documentada por Plutarco en su tratado sobre Isis y Osiris, de que el dios de los judíos era Set, el dios egipcio con cabeza de asno. Set es el asesino de Osiris, exiliado por la comunidad de los dioses y establecido en el desierto de Judea. Para los egipcios, Set es el dios de las mentiras, la guerra civil y el hambre, un equivalente politeísta de Satanás.

Después de convertirse al cristianismo, a los romanos se les enseñó que los judíos fueron los primeros en adorar al Dios verdadero, y por eso la maldad de los judíos ya no podía atribuirse a la maldad de su dios, sino que se explicaba como una consecuencia del alejamiento de los judíos de su buen Dios. Se culpó al Talmud y a la Cábala, en lugar del Tanaj, de la conducta conspirativa judía. Mientras que los antiguos egipcios, griegos y romanos habían pensado que los judíos eran un pueblo maldito porque odiaban a todos los dioses excepto a Yahvé, los cristianos creen que los judíos eran un pueblo santo mientras odiaran a todos los dioses excepto a Yahvé.

Las acusaciones no hicieron más que empeorar, e incluyeron ahora el libelo de sangre. En 1475, los judíos de Trento fueron acusados del secuestro y asesinato ritual del pequeño Simón, cuyo martirio se conmemoró en la ciudad hasta el Concilio Vaticano II. En 2007, el historiador israelí Ariel Toaff desató la polémica con su libro Blood Passover (Pascua de sangre) , en el que concluyó que el registro histórico muestra evidencias de ese asesinato ritual y del comercio de sangre cristiana por parte de judíos asquenazíes.

Pero los cristianos creen que eso es por culpa de Satanás, no de Yahvé. El problema está en “los de la sinagoga de Satanás que se dicen judíos y no lo son”, mencionados en Apocalipsis 2:9 y 3:9, de donde Candace Owens extrajo su “teoría” de que existe una poderosa red de pederastas que fingen ser judíos mientras que en realidad son satanistas.

La teoría cristiana de la “sinagoga de Satán” sostiene que los judíos cometen el mal bajo la influencia de Satán, no de Yahvé. Pero esa teoría es demostrablemente falsa: siempre que los israelíes hacen cosas satánicas, lo hacen en nombre de Yahvé, no en nombre de Satán. Netanyahu declaró que él hará con los palestinos lo que Yahvé, no Satán, ordenó a Moisés que hiciera con Amalec. Así que ya es hora de que volvamos a la teoría grecorromana: Israel es malo porque el dios de Israel es malo.

Los israelíes no tienen conciencia moral porque Yahvé les dijo que “el conocimiento del bien y del mal” es malo, mientras que obedecer sus malos mandamientos es bueno (Génesis 3).

Por cierto, ¿quién controla a los pedófilos?

Cada vez más gentiles blancos se dan cuenta del odio que viene de arriba, pero muchos todavía no saben de quién es ese odio. No se puede explicar que ese odio provenga de una camarilla secreta de gentiles blancos. Puede que estas personas sean, individualmente, ambiciosas sin escrúpulos o incluso sociópatas, pero no tiene sentido atribuirles un odio colectivo hacia la civilización que las creó. El odio de clase nunca puede tener la misma intensidad y tenacidad que el odio racial.

En definitiva, sólo una comunidad unida por una historia muy larga, por un fuerte sentido de identidad y por un plan secreto de dominación transmitido de generación en generación puede tener poder político global e influencia a largo plazo en la historia. Si esta comunidad posee además la convicción de su superioridad metafísica y un odio transgeneracional hacia sus países anfitriones, entonces su poder para causar daño es inmenso. Una red de este tipo funciona orgánicamente como un pulpo, cuyos tentáculos pueden trabajar en direcciones opuestas, pero nunca unos contra otros: lo contrario de una cesta de cangrejos.

Mencionemos como tentáculo la operación dirigida por Jeffrey Epstein y Ghislaine Maxwell para chantajear a hombres poderosos. Cuando Epstein fue llevado ante la justicia por primera vez en 2007, el juez Alexander Acosta lo liberó después de ser informado de que era “servicio de inteligencia”. Precisamente de qué servicio de inteligencia es fácil adivinarlo, ya que el suegro de Epstein, Robert Maxwell, era un miembro destacado del Mossad. Yitzhak Shamir dijo en su funeral: “Ha hecho más por Israel de lo que se puede decir hoy” (citado en Gordon Thomas, Gideon's Spies ). Según Lawrence Erickson, autor de un artículo reciente titulado “El humo de la sinagoga”, debemos considerar que Israel no sólo chantajea a políticos estadounidenses que pueden ser engañados para tener relaciones sexuales ilegales, sino que promueve a puestos de poder a individuos que están comprometidos o son conocidos por ser perversos y, por lo tanto, son más fáciles de atraer y chantajear.

Erickson sugiere que una operación similar se llevó a cabo dentro del Vaticano en la década de 1960, y fue un factor significativo en el giro filosemita del papado bajo Juan XXIII, luego bajo Juan Pablo II - el primer papa que visitó una sinagoga, el Muro de los Lamentos y Auschwitz, y declaró a los judíos los "hermanos mayores" de los cristianos. B'nai B'rith se ha infiltrado en el Vaticano y ha presionado para la promoción de homosexuales y pervertidos como cardenales. Con respecto a la misteriosa desaparición de Emanuela Orlandi, de 15 años, del Vaticano en 1983, el padre Gabriele Amorth afirmó que fue un "crimen con un motivo sexual", vinculado a una red sexual que "involucró a personal diplomático de una embajada extranjera".

Si esta tesis es correcta, incluso la pedofilia y la criminalidad sexual que plagan a las élites occidentales parecen deber más a los adoradores de Yahvé que a los adoradores de Satanás: por cierto, no hay rastro de ritos satánicos en la computadora portátil de Hunter Biden.

Así que, en última instancia, los pedófilos adoradores de Satanás pueden estar gobernándonos, pero ellos mismos son gobernados por los psicópatas adoradores de Yahvé.

Dejaré la última palabra a Bobby Fischer. No sé mucho sobre ajedrez, pero puedo decir que era un genio en el reconocimiento de patrones.

Laurent Guyénot