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Las fuerzas yemeníes participan en un desfile militar con motivo del 34º Día Nacional de Conmemoración de la Unidad Yemení, en Saná, el 22 de mayo de 2024. ©AFP/Foto para ilustración
Los servicios de seguridad yemeníes anunciaron que habían descubierto y neutralizado una red de espionaje que trabajaba para los servicios de espionaje estadounidenses e israelíes, la CIA y el Mossad.
Los servicios de seguridad yemeníes publicaron un informe el miércoles 25 de diciembre en el que informaban del arresto de varios espías de la CIA y el Mossad.
Los dos servicios de espionaje habían ordenado a estos espías que identificaran y vigilaran los emplazamientos militares yemeníes, como los de sus fuerzas de misiles, drones y sus fuerzas navales, y que recopilaran información sobre funcionarios políticos y de seguridad, así como sobre grupos sociales opuestos al régimen israelí. También recopilaron información sobre los expertos, las fábricas y los dispositivos de lanzamiento de misiles y drones del país.
Además, los espías eran los encargados de localizar al líder de Ansarallah, Abdelmalik al-Houthi, y recopilar información sobre su paradero. Esta información estaba destinada a ser transmitida al Mossad para que el régimen israelí atacara estos lugares.
Además, el reclutamiento de espías dentro de las fuerzas armadas yemeníes también formaba parte de los proyectos del Mossad y la CIA.
Según el informe, uno de los espías arrestados, llamado Hamid Majali, era responsable de reclutar espías para el Mossad y la CIA desde el inicio de la Operación Tormenta de Al-Aqsa.
Majali trabajó para los servicios de inteligencia de Arabia Saudita en 2008 y luego se unió a los servicios de espionaje de Estados Unidos.
Estos dos servicios de espionaje también intentaron obstaculizar el apoyo de la nación yemení al pueblo palestino en la Franja de Gaza.
Los servicios de seguridad yemeníes dijeron que los detalles de la operación se harían públicos una vez que se completaran las investigaciones. Los informes sobre intentos de espionaje vinculados a Washington y Tel Aviv en Yemen no son nuevos. A principios de junio, el ejército yemení anunció que había desmantelado una red de espionaje estadounidense e israelí, asestando un duro golpe a los intentos de socavar las instituciones gubernamentales yemeníes.
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