Los hutíes y el futuro de Egipto

Publié par Contra información sur 25 Décembre 2024, 16:44pm

El líder de Ansarallah, Abdul Malik al-Houthi, que lidera las fuerzas de los zayditas, una facción chiita particular que ha estado durante mucho tiempo en guerra contra la coalición del Golfo liderada por Arabia Saudita, genera preocupación.

Egipto debe ser extremadamente cauteloso, declara. Debe desconfiar de Israel, con el cual parece mantener hoy buenas relaciones diplomáticas.

Porque la situación, tanto internacional como interna, parece estar deteriorándose rápidamente. Y Tel Aviv podría aprovechar esto para desestabilizar a Egipto.

Dicho así, podría parecer una diatriba sin sentido real, una broma de un líder terrorista de una región remota.

Pero ese no es el caso. En primer lugar, porque los llamados hutíes, los rebeldes yemeníes de confesión zaidita, no son un simple grupo de terroristas que se podría considerar insignificante.

Por el contrario, representan una fuerza militar notable, capaz de mantener a raya a los saudíes y otros países del Golfo durante años. Y ello a pesar del fuerte apoyo aéreo que la coalición del Golfo recibe de Estados Unidos y Gran Bretaña. Sin olvidar otra misión de control naval de la que Italia también forma parte.

Pero, a pesar de tanto despliegue de fuerzas, los hutíes no sólo han logrado mantener el control de su territorio en Yemen del Norte, sino que también han hecho extremadamente difícil el paso por Suez. Esta ruta está ahora, de hecho, prohibida a los buques estadounidenses y europeos, obligados a circunnavegar África, con las repercusiones económicas que se pueden imaginar fácilmente.

Además, los houthis han adoptado una clara posición a favor de Gaza y de los palestinos de Hamas, lanzando repetidamente ataques con misiles contra Israel. Estos ataques parecen ineficaces, pero son suficientes para preocupar a Netanyahu y su gobierno, que responden con ataques aéreos y golpean las bases hutíes en Yemen.

Por lo tanto, las declaraciones de Abdul Malik deben tomarse en serio. Terriblemente en serio, ya que parece prever una desestabilización de Egipto, hipótesis que ninguna otra fuente, a mi conocimiento, ha mencionado hasta ahora.

Sin embargo, se trata de una amenaza real. Porque el gobierno de Al Sisi parece firmemente en el poder, pero en realidad descansa sobre un polvorín.

Las facciones vinculadas a los Hermanos Musulmanes están hirviendo bajo la aparente calma. Y se están preparando para el regreso.

También porque pueden contar, con toda probabilidad, con el apoyo, o al menos con la connivencia, de los europeos y, sobre todo, de los estadounidenses.

Así como de Israel, que tendría todo el interés en ver un Egipto desestabilizado.

Un Egipto en manos de facciones yihadistas que, recordemos, nunca han creado problemas en Tel-Aviv. Por el contrario, siempre han desempeñado su papel para combatir al frente chiíta, considerado, con razón, por Netanyahu, como su principal y más amenazador adversario.

Un Egipto desestabilizado o, peor aún, controlado por los Hermanos Musulmanes, sería, de hecho, útil para aquellas fuerzas que quieren mantener al mundo árabe en una posición de debilidad y sumisión. Estas fuerzas, numerosas, son a menudo difíciles de identificar.

El líder de los hutíes ha lanzado su alerta, advirtiendo públicamente a al-Sisi.

En los próximos meses veremos si se trata simplemente de una declaración estéril.

Sinceramente, me temo que es una advertencia muy grave y preocupante.

Andrea Marcigliano

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