Queridos amigos,
Hoy 2 de agosto he sido condenado a 6 años de prisión. Así, mi actividad como periodista, editor y político fue apreciada al más alto nivel por los círculos globalistas que controlan el poder en mi país, la República de Moldavia. En particular, el hecho de que estuve entre los pocos y más críticos de la falsa pandemia de Covid-19, la Agenda 2030 de la ONU y la tiranía digital de la tecnocracia satánica. Entre los "delitos menores" más graves que cometí en los últimos siete años figura la organización de un grupo de expertos internacional Foro de Chisinau, que reunió a decenas de destacados intelectuales de todo el mundo que forman parte de la Resistencia antiglobalista.
En los últimos años he editado multitud de libros de importantes autores de la disidencia internacional, además de varios libros propios. He conseguido realizar una serie de entrevistas a académicos y estudiosos de varios países. Elaboro todos los días mis discursos que aparecen en formato de vídeo.
Tuve una larga carrera política, 4 mandatos como diputado, 2 como vicepresidente del Parlamento, uno como viceprimer ministro. Siempre me han penalizado por mis creencias y actitudes públicas. Pero esta vez el régimen de ocupación globalista de Chisinau ejecutó perfectamente el papel que se le había asignado.
En 15 días tenemos derecho a apelar la decisión de primera instancia ante el Tribunal de Apelación. Luego sigue la Corte Suprema de Justicia. Ya no me hago ilusiones sobre lo que sucederá a continuación.
Sigo siendo un luchador cristiano ortodoxo, un patriota de mi país y que no acepta el silencio ni el compromiso a cambio de mi propia comodidad.
Nuestra lucha continúa.
¡Dios los bendiga a todos!
Yuri Roshka