Estados Unidos afirma que el puerto sirve para facilitar la ayuda humanitaria, pero podría utilizarse para una limpieza étnica de Gaza según los planes israelíes previamente filtrados.
Un barco militar estadounidense zarpó el 11 de marzo para viajar a la costa de la sitiada Franja de Gaza y construir un puerto temporal.
Sin embargo, siguen surgiendo dudas sobre las intenciones de Estados Unidos para la construcción del puerto.
Hisham Khreisat, un experto jordano en asuntos estratégicos y militares, sugirió que la motivación para construir el puerto era facilitar la deportación de la población de Gaza por barco.
Khreisat dijo a la Agencia Anadolu que "el puerto flotante frente a las costas de Gaza es una fachada humanitaria que oculta la migración voluntaria a Europa".
"Este puerto táctico militar recibirá la aprobación israelí porque el primer ministro Benjamín Netanyahu ha estado buscando esta idea desde el comienzo de la guerra, apuntando al desplazamiento voluntario de los habitantes de Gaza y su [huida] a Europa", añadió.
La Casa Blanca afirma que desea construir el puerto para llevar ayuda humanitaria a Gaza, ya que cientos de miles de palestinos corren el riesgo de morir de hambre debido al bloqueo de Israel.
Pero la BBC señaló que la construcción del puerto tardaría al menos 60 días y que "las organizaciones benéficas han dicho que quienes sufren en Gaza no pueden esperar tanto".
Si Estados Unidos quisiera evitar la hambruna en Gaza, simplemente podría usar su influencia como principal proveedor de armas de Israel para obligar a Tel Aviv a permitir que ingrese más ayuda en convoyes de camiones a través de los cruces terrestres existentes.
El 13 de octubre, pocos días después del comienzo de la guerra en Gaza, el Ministerio de Inteligencia israelí emitió un documento pidiendo la expulsión forzosa de los 2,3 millones de habitantes de la franja bajo un pretexto humanitario.
El documento filtrado recomienda hacer que las condiciones en Gaza sean tan inhabitables que su población se vería obligada a huir a otros países, incluidos al Sinaí de Egipto, Grecia, España y Canadá.
Israel podría justificar la deportación ante la comunidad internacional, según el plan, si parece conducir a "menos víctimas entre la población civil en comparación con el número esperado de víctimas si permanecen", dice el documento.
El horrible bombardeo israelí de Gaza desde el 7 de octubre ha creado precisamente esas condiciones, matando al menos a 30.000 palestinos, en su mayoría mujeres y niños.
El riesgo de hambruna, provocado por el bloqueo de Israel, también ha creado las condiciones para que la deportación de 2,3 millones de habitantes de Gaza parezca un gesto humanitario.
Estas condiciones podrían crearse aún más si Israel lleva a cabo una operación terrestre en Rafah, donde se refugian más de un millón de habitantes de Gaza desplazados de otras zonas de la franja.
Hasta ahora, Egipto se ha negado a permitir que los habitantes de Gaza entren al Sinaí, lo que hace que la deportación por mar a Europa sea más atractiva para los planificadores israelíes.
El Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) también emitió una advertencia sobre el plan estadounidense de construir un puerto temporal frente a la costa de Gaza.
El movimiento de resistencia destacó que el plan estadounidense es "sospechoso y dudoso", ya que abriría la puerta al desplazamiento forzado de la población de Gaza con pretextos humanitarios y de otro tipo.
El movimiento también acusó al presidente Joe Biden de establecer el puerto para apaciguar a la opinión pública estadounidense. A medida que se acercan las elecciones presidenciales, grandes segmentos de su base de votantes demócratas han criticado a Biden por su apoyo al actual genocidio de Israel en Gaza, incluida la falta de ayuda que llega a los palestinos hambrientos.
La declaración del FPLP agregó que la Resistencia Palestina permanecerá vigilante y enfrentará cualquier "plan sospechoso de Estados Unidos o cualquier otra acción que pueda obligar a los palestinos a ser expulsados para liquidar la causa palestina".
La declaración confirmó además que la presencia estadounidense sería un objetivo legítimo para la Resistencia.