Cada película de Hollywood es una operación de guerra. Descargar tu mente en un Avatar

Publié par Contra información sur 26 Septembre 2022, 11:45am

Logotipo de Avatar 2 y logotipo de la masonería. "Las logias han tomado una iniciativa la de sustituir el mundo natural por un mundo virtual..."

Cada película de Hollywood es una operación de guerra. Se gastan millones para meter un mensaje en la mente de la gente.

La operación Avatar, la película más cara de la historia del cine, fue diseñada para atraer a las almas al mundo virtual, cuando normalmente deberían abrirse a la dimensión etérica.

¿Te ha gustado Avatar? Te gustaría la dimensión etérica. El mundo virtual que se está desarrollando actualmente imita el mundo etérico y sus leyes. La película se basa en aspiraciones reales, aspiraciones del alma correspondientes a la era de Acuario: se aspira a estar en la dimensión etérica, se quiere estar en la Naturaleza, se quiere encontrar a los hermanos espirituales...Pero esta película está rodada de una manera que te hace pensar: "¡Woah! La tecnología. Puede liberarnos de la materia pesada, de la gravedad." Uno piensa que el mundo virtual es positivo, que va a conocer gente y a tener experiencias maravillosas. No, el mundo virtual no conduce a lo etérico, nos encierra en una prisión electromagnética. Nos identificamos con el héroe que puede vivir cosas fabulosas gracias a un avatar artificial, mientras que en la realidad -y ahí está la perversidad de la película- el héroe en cuestión es un minusválido que se encuentra decrépito en un búnker tecnológico. ¿La película Avatar va por delante o por detrás de los tiempos? La revista New Scientist nos pone al día de las investigaciones científicas sobre los avatares.

Descargar tu mente en un avatar

Varias empresas te proponen vivir eternamente creando tu propio doble digital. Su objetivo de partida es permitirte crear una representación digital de ti mismo, un avatar, que seguirá ahí cuando tú ya no estés. Un "gemelo" digital que puede impartir valiosas lecciones a sus bisnietos y darles una buena idea de cómo era su antepasado. El objetivo final de estos trabajos es crear un avatar consciente, integrarlo en un robot humanoide y lograr así la inmortalidad.

"Si consigues almacenar tu yo en el cerebro de este avatar, éste puede durar indefinidamente", afirma Nick Mayer, de Lifenaut, una empresa estadounidense que estudia diferentes técnicas para crear avatares.

Con el tiempo, el avatar de Lifenaut se parecerá a ti, hablará como tú y podrá describir los acontecimientos clave de tu vida. El día de tu boda, por ejemplo. Pero, ¿hasta dónde pueden llegar estas tecnologías? ¿Hasta qué punto se puede descargar nuestra personalidad y conocimientos en un ordenador? ¿Podemos esperar utilizar estos avatares para resucitar a los muertos? [...]

Pero hay que saber que, hoy en día, el control tecnológico no se limita a rastrear tu cuerpo. Quiere archivar tu personalidad. Así, todo el mundo está invitado, como habrás notado, a entregar un máximo de informaciones sobre uno mismo a la máquina informática. Inconscientemente, creamos nuestro propio avatar cada día. Imagina que eres un joven ordinario, bien integrado en el sistema tecnológico actual. A través de Facebook, conocemos a tus amigos, tus gustos musicales. A través de tu blog conocemos tus inquietudes, las películas que ves. Pero ni siquiera necesitas de todo esto. Con tu teléfono móvil, permanentemente conectado a Internet, puedes navegar sin límites. Conocemos tus intereses, seguimos la línea de tu pensamiento. Tomas fotos de tu vida, filmas los momentos emotivos. La máquina "captura" tus recuerdos. Tu GPS integrado rastrea tus movimientos. Entonces conocemos tus movimientos, tus lugares favoritos A medida que estas tecnologías mejoren, pronto se podrá será grabar las emociones.

La vida se convierte en una película que se puede grabar y visualizar cuando se quiera. Todo queda registrado, archivado. Pero cuidado, Ahriman no olvida nada, nunca nada. Toda esta información, una vez recopilada, refleja tu personalidad. Se obtiene un retrato robot multimedia de uno mismo. Esto se puede guardar en una memoria USB. No lo sabes, pero este retrato robot siempre cobrará más vida y, en el futuro, se convertirá en tu avatar. Te guste o no. Cada información que te concierne, entregada a la máquina, alimenta a tu personaje virtual. En un siglo, tal vez menos, podrá descargarse en la máquina que será tu cuerpo.

Este avatar te servirá de personalidad y un organismo artificial de cuerpo. El todo se unirá a tu conciencia desencarnada, atrapada en la esfera electromagnética (ver La Octava Esfera). Lo peor es que te reconocerás en esta entidad virtual.

Lucien Tschabold

Nota:

Dos vías bien distintas:

- La primera consiste a trabajar para alcanzar la inmortalidad (espiritual), y ascender a la dimensión etérica.

- La segunda implica aceptar el programa de los Iniciados Oscuros, que nos conduce al infierno de la Octava Esfera. Las logias han tomado la iniciativa de sustituir el mundo natural por un mundo virtual, en ruptura con las leyes universales. Están en su derecho. Vuelven a revivir el mito de la caída, encontrándose en una esfera de la vida aún más aprisionante que la dimensión terrenal.

bouddhanar