La viruela del mono sirve para encubrir los daños causados en el sistema inmunitario por la vacuna COVID, que dio lugar a la Culebrilla (herpes zóster), enfermedad vesicular autoinmune e infección por herpes

Publié par Contra información sur 11 Juin 2022, 18:27pm

¿No le parece curioso que en el espacio de 50 años, la viruela del mono nunca se extendió realmente fuera de unos pocos países de África, pero a los dos años de la supuesta aparición del Covid-19, la viruela del mono de repente está presente en todos los países occidentales y está siendo promocionada por parte de las autoridades de salud pública, los principales medios de comunicación y la Organización Mundial de la Salud?

Si no lo sabes, no querrás leer esto porque podrías perderte el último episodio de BBC News a las 6 de la tarde. Pero si lo haces, puede que te sorprendas al descubrir que hay pruebas que sugieren que la denominada epidemia de viruela del mono puede ser, de hecho, el resultado del programa de vacunación Covid-19.

¿Cómo es eso?

Bueno, tiene algo que ver con el herpes, la culebrilla, la enfermedad vesicular autoinmune y el hecho de que la vacuna Covid-19 daña significativamente el sistema inmunológico natural.

Aquí hay un mapa que muestra los países donde se han informado casos "confirmados" de viruela del mono a la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde mediados de mayo de 2022:

Es una broma. La imagen de arriba es en realidad un mapa que muestra las principales distribuciones de la vacuna de Pfizer.

Este es el mapa real que muestra los países donde se han notificado casos "confirmados" de viruela del mono a la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde mediados de mayo de 2022.

Aquí están las dos mapas juntos para que puedas jugar al juego de encontrar la diferencia entre ellos:

Con la excepción de unos pocos países, no hay ninguna diferencia real, y todos los países que han notificado casos sospechosos de viruela del mono desde mayo de 2022 y en los que la enfermedad no era ya endémica son países que también han distribuido la inyección Covid-19 de Pfizer.

Ahora bien, esto podría ser, por supuesto, una más de la larga lista de "coincidencias" que se han producido desde principios de 2020. Pero, por desgracia, las pruebas sugieren lo contrario.

La viruela del mono se identificó por primera vez en humanos en 1970 en la República Democrática del Congo en un niño de 9 años. Desde entonces, se han registrado casos humanos de viruela del mono en 11 países africanos. No fue hasta 2003 cuando se registró la primera epidemia de viruela del mono fuera de África y es en Estados Unidos.

Según un estudio científico publicado en 1988, entre 1981 y 1986, 977 personas con una erupción cutánea no diagnosticada clínicamente como viruela del mono han sido analizadas en un laboratorio de Zaire (actual República Democrática del Congo).

Los científicos que realizaron el estudio declararon lo siguiente:

“Las dificultades diagnósticas se basaron principalmente en las características clínicas de la varicela: pleomorfismo regional (en el 46% de los casos mal diagnosticados), distribución corporal indefinida de erupciones cutáneas (49%) y distribución centrípeta de las lesiones cutáneas (17%). Una hipertrofia de los ganglios linfáticos fue observada en el 76% de los pacientes mal diagnosticados. En ausencia de viruela, el principal problema de diagnóstico clínico es diferenciar la viruela del mono humana de la varicela.”

En términos sencillos, es muy difícil distinguir la viruela del mono de la varicela. La varicela está causada por un tipo de virus del herpes.

El virus de la varicela se conoce técnicamente como virus de la varicela-zóster y, al igual que su pariente cercano el virus del herpes simple, está presente en el cuerpo durante toda la vida.

Y al igual que su otro primo, el herpes genital, la varicela puede permanecer en silencio durante muchos años, escondiéndose en el interior de las células nerviosas, y puede reactivarse más tarde, causando estragos en forma de un trastorno cutáneo insoportable, el herpes zóster, que es una erupción cutáneas con ampollas y ardor.

Desgraciadamente, o afortunadamente, dependiendo de si eligió recibir la inyección de Covid-19, los datos oficiales del gobierno y los documentos confidenciales de Pfizer sugieren fuertemente que la inyección de Covid-19 podría reactivar el virus latente de la varicela o del herpes, debido al espantoso daño que produce en el sistema inmunológico.

Esto significa que quizá no estemos asistiendo a una epidemia mundial de viruela del mono, sino a un encubrimiento masivo de las consecuencias de la administración de una inyección experimental a millones de personas.

La Food and Drug Administration (FDA) americana intentó retrasar la publicación de los datos de seguridad de la vacuna COV!D-19 de Pfizer durante 75 años, a pesar de aprobar la inyección tras sólo 108 días de revisión de seguridad el 11 de diciembre de 2020.

Pero a principios de enero de 2022, el juez federal Mark Pittman les ordenó publicar 55.000 páginas al mes. Publicaron 12.000 páginas a finales de enero.

Desde entonces, el PHMPT ha publicado todos los documentos en su sitio web. La última presentación fue el 1 de junio de 2022.

Uno de los documentos contenidos en el volcado de datos es "reissue_5.3.6 postmarketing experience.pdf". La página 21 de este documento confidencial contiene datos sobre acontecimientos adversos de especial interés, uno de los cuales es específicamente las infecciones causadas por el virus del herpes.

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Según el documento, a finales de febrero de 2021, apenas dos meses después de que la vacuna Pfizer recibiera la aprobación de uso de emergencia en los Estados Unidos y el Reino Unido, Pfizer había recibido 8.152 informes relacionados con la infección por herpes, y 18 de ellos ya habían dado lugar al síndrome de disfunción orgánica múltiple.

El síndrome de disfunción de órganos múltiples (MODS por sus siglas en inglés) es una respuesta inflamatoria sistémica y disfuncional que requiere una larga estancia en una unidad de cuidados intensivos (UCI). Se caracteriza por una elevada tasa de mortalidad en función del número de órganos afectados. Puede ser causado por una infección de herpes, como lo demuestra este estudio científico que se encuentra aquí.

Otras pruebas publicadas por el gobierno norteamericano, pero en particular por los Centers for Disease Control muestran que los casos de herpes, herpes zóster y síndrome de disfunción múltiple de órganos en realidad se dispararon en los Estados Unidos después de la inyección de Covid-19.

La siguiente tabla muestra el número de infecciones y complicaciones relacionadas con el herpes notificadas al VAERS como acontecimientos adversos para todas las vacunas (incluidas las inyecciones Covid-19) por año de notificación, y para las vacunas Covid-19 únicamente por año de notificación.

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La siguiente tabla muestra los efectos adversos de las inyecciones de Covid-19 notificados a los CDC con respecto al herpes, la culebrilla y el síndrome de disfunción orgánico múltiple hasta el 13 de mayo de 2022.

También muestra el número de acontecimientos adversos notificados para las vacunas contra la gripe, todas las vacunas combinadas (excluyendo las inyecciones de Covid-19) y las vacunas contra el VPH y la viruela entre 2008 y 2020.

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Como se puede observar, son las inyecciones de Covid-19 las que han provocado el mayor número de infecciones relacionadas con el herpes en 17 meses. Si se compara esta cifra con el número de rebrotes notificados contra las vacunas contra HPV/ y la viruela lo largo de 13 años, estas cifras son extremadamente preocupantes.

Tampoco es porque muchas personas hayan recibido una inyección de Cov!d-19. Las cifras oficiales de los CDC muestran que sólo entre 2008 y 2020 se administraron 1.700 millones de dosis de la vacuna contra la gripe. Hasta el 6 de mayo de 2022, se habían administrado 580 millones de dosis de la vacuna Covid-19 en Estados Unidos.

El siguiente gráfico muestra la tasa de acontecimientos adversos relacionados con el herpes, la culebrilla y el síndrome de órganos múltiples por cada millón de dosis administradas.ç

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La tasa de infecciones relacionadas con el herpes notificadas como efectos adversos de las vacunas contra la gripe es de 0,75 efectos adversos por cada millón de dosis administradas. Sin embargo, la tasa de infecciones por herpes notificadas como efectos adversos para las inyecciones de Covid-19 es de 31,31 efectos adversos por cada millón de dosis administradas.

Se trata de una diferencia del 4075%, lo que indica un problema muy grave. Un problema grave que se debe a que las inyecciones de Covid-19 diezman el sistema inmunitario.

El siguiente gráfico muestra la eficacia de la vacuna Covid-19 en la población triplemente vacunada en Inglaterra en los informes de vigilancia de vacunas de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido para la semana 3, la semana 7 y la semana 13 de 2022.

Los datos muestran que la eficacia de las vacunas disminuyó mes a mes, y que la eficacia más baja se registró en el grupo de edad de 60 a 69 años, con un impactante -391%. Este grupo de edad también ha experimentado el mayor descenso, ya que en la tercera semana se redujo en un 104,69%.

Pero uno de los descensos más preocupantes en la eficacia de la vacuna se produjo en las personas de 18 a 29 años, pasando de un +10,19% en la semana 3 a un -231% en la semana 12 de 2022.

Una eficacia de la vacuna negativa indica un daño en el sistema inmunológico porque la eficacia de la vacuna no es realmente una medida de la efectividad de una vacuna. Es una medida del rendimiento del sistema inmunitario de una persona vacunada en comparación con el rendimiento del sistema inmunitario de una persona no vacunada.

La inyección de Cov!d-19 instruye específicamente a las células para que produzcan la llamada proteína espiga (S) del SARS-CoV-2. El sistema inmunitario se supone que se encargará del resto y se acordará de hacerlo de nuevo si se encuentra con el virus del SARS-CoV-2. Así que cuando las autoridades dicen que la eficacia de las vacunas se debilita con el tiempo, lo que realmente quieren decir es que el rendimiento de tu sistema inmunológico se debilita con el tiempo.

El siguiente gráfico muestra las tasas de mortalidad relacionadas con el Covid-19 por cada 100.000 personas según el estado de vacunación en Inglaterra en marzo de 2022, según los datos publicados por la UKHSA.

Como se puede ver, la mayoría de los grupos de edad vacunados tienen una tasa de mortalidad por Covid-19 más alta que los grupos de edad no vacunados. Esto no es un signo de que la vacuna sea eficaz, sino de que la vacuna Covid ha dañado el sistema inmunitario. ¿Cómo si no podemos explicar el hecho de que las personas vacunadas tengan más probabilidades de morir de Covid-19 que las no vacunadas?

Los datos sugieren que se necesitan unos cinco meses para que el daño al sistema inmunitario causado por la inyección de Covid-19 sea suficiente para aumentar el riesgo de muerte.

El 17 de mayo, la Office for National Statistics (ONS) publicó su último conjunto de datos sobre las muertes por estado de vacunación en Inglaterra, y reveló toda una serie de resultados impactantes.

La tabla 1 del conjunto de datos de la ONS contiene las cifras de las tasas mensuales de mortalidad estandarizadas por edad, según el estado de vacunación, para las muertes ocurridas entre el 1 de enero de 21 y el 31 de marzo de 22. La primera inyección de Covid-19 se administró en Inglaterra el 8 de diciembre de 2021, y estas son las cifras de las tasas de mortalidad por estado de vacunación en los 4 meses siguientes.

Los no vacunados tuvieron una probabilidad significativamente mayor de morir por cualquier causa que no fuera el Covid-19 que la población vacunada en enero y febrero de 2021, antes de que las tasas parecieran normalizarse a finales de abril.

Pero mira lo que pasó a partir de mayo de 2021...

De repente, la población vacunada en su conjunto tenía más probabilidades de morir que la no vacunada por cualquier causa que no fuera el Covid-19, y esta tendencia ha continuado mes tras mes desde entonces. También resulta que esta tendencia coincide con los que recibieron primero las inyecciones de Covid-19, junto con los vacunados en Inglaterra por orden de edad.

Los datos de la ONS indican que, o bien las inyecciones de Covid-19 tardan unos 5 meses en diezmar completamente el sistema inmunitario hasta el punto de que las posibilidades de que una persona muera por cualquier causa aumentan considerablemente, o bien las inyecciones de Covid-19 matan directamente a miles de personas de una manera lenta y dolorosa que tarda una media de 5 meses en consumarse.

Así que ahora debes saber que las inyecciones de Covid-19 ciertamente dañan el sistema inmunológico natural. En este caso, es perfectamente plausible que los virus latentes del herpes y la varicela se reactiven, dando lugar a un brote sin precedentes de infecciones de herpes y culebrilla.

Pero hay otra enfermedad que las autoridades podrían etiquetar falsamente como viruela del mono, y tenemos que volver a los documentos confidenciales de Pfizer para encontrarla.

Esta afección está oculta en la larga lista de 9 páginas de efectos adversos de especial interés que figura al final del documento reissue_5.3.6 postmarketing experience.pdf de Pfizer.

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Enfermedad vesicular autoinmune.

La enfermedad vesicular autoinmune provoca ampollas en la piel y las mucosas de todo el cuerpo. Puede afectar a la boca, la nariz, la garganta, los ojos y los genitales.

No se comprende del todo, pero los "expertos" creen que se desencadena cuando una persona con tendencia genética a contraer la enfermedad entra en contacto con un desencadenante ambiental. Puede tratarse de una sustancia química o de una droga. ¿Como la inyección Covid-19 de Pfizer?

Así que ahí tienen, un conjunto de pruebas que sugieren que las autoridades podrían encubrir muy fácilmente las consecuencias de la vacunación Covid-19 con una falsa pandemia de viruela del mono. Pero si nuestro despliegue de pruebas no es suficiente para convencerte, quizás este estudio científico publicado en octubre de 2021 lo haga -

Pero aunque el drama de la viruela del mono no sea más que una mascarada, no crean que las autoridades no están dispuestas a llegar tan lejos, o más, que los dos miserables años que han obligado al mundo a sufrir en nombre del Covid-19.

En el Reino Unido, la Agencia Británica de Seguridad Sanitaria (UKHSA) ha convertido la viruela del mono en una enfermedad de declaración obligatoria, lo que significa que todos los médicos y los médicos de cabecera deben informar a la UKHSA de cualquier caso que encuentren. Esto se suma a la recomendación anterior de aislar en casa durante tres semanas cualquier contacto cercano con una persona sospechosa de tener viruela del mono.

Mientras tanto, en Estados Unidos, los CDC acaban de anunciar que se recomiendan de nuevo las mascarillas para "prevenir la transmisión de la viruela del mono en la comunidad".

Dudamos que el CDC entienda alguna vez que las máscaras simplemente no funcionan, pero hagamos como si lo hicieran y que realmente hay una epidemia de viruela del mono. ¿No sabe el CDC que el virus de la viruela del mono no se transmite por el aire y que sólo se transmite por contacto físico, generalmente íntimo?

Y ahora, el Dr. Tedros, Director de la Organización Mundial de la Salud, advierte que la viruela del mono es ahora un riesgo real y que la OMS está muy preocupada por la seguridad de los niños y las mujeres embarazadas. En una nueva declaración, concluye diciendo que la OMS publicará una serie de directrices y consejos para que los países los sigan inmediatamente...