Evitando el consentimiento de los ciudadanos, las vacunas contagiosas

Publié par Contra información sur 27 Juin 2022, 11:55am

Desde hace dos décadas, los científicos han estado desarrollando silenciosamente vacunas contagiosas que se propagan por sí solas. El (NIH) ha financiado estas investigaciones, en la que ADN de un agente patógeno mortal es incorporado a un virus contagioso pero menos dañino, o la letalidad del virus mortal se debilita al diseñarlo en un laboratorio.

Las "vacunas" que se generan se propagan de persona a persona como un virus respiratorio contagioso. Solo sería necesario inmunizar al cinco por ciento de las poblaciones regionales; el otro noventa y cinco por ciento "atraparía" la vacuna a medida que se propaga de persona a persona a través de la transmisión comunitaria.

Esta tecnología permite evitar los inconvenientes de los ciudadanos recalcitrantes que podrían negarse a dar su consentimiento. Sus defensores señalan que una campaña de vacunación masiva que normalmente llevaría meses de costosos esfuerzos para inmunizar a todo el mundo podría reducirse a unas pocas semanas.

Vacunas contagiosas probadas en animales

Los científicos ya han hecho una demostración del concepto en poblaciones animales: en el año 2000, investigadores españoles inyectaron a conejos una vacuna transmisible y los soltaron en la naturaleza, donde rápidamente transmitieron la vacuna a cientos de otros, lo que supuestamente detuvo una epidemia viral. Los países europeos están probando la tecnología en cerdos.

A raíz de COVID-19, una docena de instituciones de investigación de Estados Unidos, Europa y Australia están explorando los posibles usos humanos de las vacunas autopropagables. La Agencia Federal de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA), por ejemplo, está estudiando la tecnología para que el ejército estadounidense se proteja contra la fiebre de Lassa de África Occidental, un virus que se transmite de las ratas a los humanos. Este proyecto, cabe señalar, no requiere el consentimiento de los militares.

En 2019, el gobierno del Reino Unido comenzó a explorar esta tecnología para hacer frente a la gripe estacional. Un documento de investigación del Ministerio de Sanidad y Asistencia Social del Reino Unido indicaba que los estudiantes universitarios podrían ser un grupo objetivo evidente:

No trabajan, por lo que [vacunarlos] no causará muchos trastornos económicos y la mayoría tiene una segunda residencia a la que acudir, por lo que la vacuna se extendería.

"Una vacuna contagiosa causaría algunas muertes

Los investigadores admitieron que una vacuna contagiosa para un virus de la gripe atenuado causaría algunas muertes, pero estimaron que serían menos que para el virus de la gripe original. Como describe el informe del gobierno del Reino Unido:

"Las vacunas autopropagables son menos letales, pero no son NO letales: todavía pueden matar. Algunas personas que de otro modo habrían vivido morirán, pero en general, morirá menos gente".

Como dice el refrán, no se puede hacer una tortilla sin romper los huevos. O, retomando la formulación de Lenin, si hay que talar un bosque, las astillas volarán. Las vacunas contagiosas están a punto de llegar, dicen sus defensores, y no son diferentes de añadir flúor al agua potable. Además, para aquellos a los que les resultan desagradables las inyecciones, las agujas no son necesarias.

Investigación financiada por el gobierno de virus creados en el laboratorio para crear vacunas contagiosas y autopropagables que se saltan el consentimiento de los ciudadanos: ¿qué puede salir mal?

Aaron Kheriaty

brownstone