Suicido asistido nacional

Publié par Contra información sur 2 Avril 2022, 17:57pm

La semana pasada, el momento decisivo de la crisis de la salud mental de Estados Unidos ha sido la victoria de la nadadora de la Universidad de Pensilvania Lia Thomas, en el campeonato NCAA de 500 metros de estilo libre femenino. Esta victoria se celebró en los periódicos deportivos como una cosa, es decir, una pretendida característica de la realidad. Lia Thomas comenzó su "transición" en 2019, cuando "ella" era un ser humano masculino adulto, también conocido como "hombre", y ya competía en las pruebas de natación masculina de la NCAA. Una cosa que se puede concluir de esto es que la Junta Directiva de la NCAA se ha vuelto loca.

No es la única institución de nuestro país que ha perdido la cabeza. ¿Te sientes cómodo con esto? Aparte de algunos cuentos de hadas que implican a emperadores desnudos, sólo existe un ejemplo más grande de un pueblo que se deja insultar tan voluntariamente por las mentiras, y es la campaña aún en curso encaminada a "vacunar" y "reforzar" a la población contra el Covid-19 con un cóctel genético que no funciona para prevenir la enfermedad o su transmisión y que ya ha matado o herido a varios miles de personas.

Sin embargo, siguen ahí promoviendo las vacunas: Rochelle Walensky del CDC, el Dr. Anthony Fauci, Mary Basset (Comisionada de Salud Pública de Nueva York), y muchos otros funcionarios de otros países. Esta es una parte importante del suicidio esceneficado de Estados Unidos, así como del resto de la sociedad occidental. El VAERS (Sistema de Notificación de Efectos Adversos de las Vacunas) de nuestro gobierno registra ahora un total de 24.177 casos de pericarditis y miocarditis para todo el año 2021, y 11.829 casos sólo en enero y febrero de 2022. ¿Considera que es una tendencia preocupante? Estas son sólo dos enfermedades mortales relacionadas con las vacunas; hay más de mil más.

Las personas que se dejan engañar que reciben refuerzos ahora están tomando proteínas espigas tóxicas adicionales además de las que ya han adquirido con las dos primeras inyecciones. ¿Podemos predecir que varias de ellas desarrollarán una serie de trastornos corporales aterradores y morirán o quedarán discapacitadas en los próximos dos años? Incluso puede que pronto sea difícil para las multitudes "azules", woked, vacunadas y dementes de Trump ignorar el inminente asesinato en masas al que han sido sometidas.

Una perspectiva tan poco apetecible podría explicar el hecho que Estados Unidos haya excitado imprudentemente al oso ruso sobre el futuro de Ucrania, una distracción en relación a la imagen que se desarrolla del suicidio nacional asistido aquí en casa. La perspectiva de una tercera guerra mundial es aparentemente más convincente que la información emergente de que el gobierno estadounidense está matando a su propia gente, y cubriéndose la cara en el proceso.

"Joe Biden" y compañía podrían haber evitado la "operación" de Rusia allí simplemente reiterando lo que la propia OTAN había dicho: que Ucrania no sería invitada a unirse a la alianza. Pero Ucrania ha sido un cliente especial de los Estados Unidos desde 2014, cuando cambiamos a un gobierno molesto allí.

Desde entonces, hemos utilizado a Ucrania como blanqueo internacional, una base avanzada por procuración para la OTAN y, aparentemente, una ubicación remota de los Estados Unidos para establecer laboratorios de armas biológicas cuando nuestro propio gobierno ha decretado una "moratoria" en la investigación de ganancia de función en 2014.

Una parte de la actividad de la base avanzada en Ucrania desde 2014 fue el entrenamiento y el armamento del ejército ucraniano de 600.000 efectivos, una de las mayores fuerzas armadas del mundo, que ahora Rusia se siente obligada a desarmar y neutralizar. Cómo pudo Rusia tener éxito en este empeño, con una fuerza operativa de unos 200.000 hombres, es objeto de una guerra de propaganda librada a un nivel muy lejano de la acción sobre el terreno.

La realidad, como cabía esperar de un número tan bajo de tropas, fue un trabajo duro para los rusos. Los misiles javelin (Jabalina) estadounidenses resultaron letales para los tanques y vehículos blindados rusos. Pero, en contra de la narrativa de la CNN y el New York Times, Rusia está lejos de haber "perdido" la batalla. Las fuerzas rusas están metiendo en cintura a las unidades más fuertes de Ucrania, los famosos batallones Azov, a lo largo de la línea de Donbass en el este. Hay muchos. Están rodeados, aislados de su mando central, y ahora tienen la opción de rendirse o ser masacrados. Por el momento, es la elección de Ucrania.

Para los rusos, se trata, como dicen, de una cuestión existencial, a la que ya se han enfrentado antes y comprenden lo que está en juego: piensen en Napoleón y Hitler. Estados Unidos ha mostrado, al menos, una voluntad desorbitada de enemistarse con Rusia utilizando a Ucrania. Se trata de una nueva locura. En los primeros años de Putin como jefe de Estado, Rusia pidió entrar en la OTAN, con el objetivo de ser tratada como una nación europea normal tras superar 75 años de locura soviética. La solicitud fue rechazada.

Veinte años más tarde, y muchos casos de antagonismo por medio, Rusia tuvo suficiente. Está haciendo algo que Estados Unidos ya no puede hacer: establecer límites. Ucrania no se utilizará como plataforma para nuevos antagonismos. Nuestra respuesta: arruinar la economía global comenzando con el sistema monetario internacional y posiblemente provocar una hambruna mundial destruyendo las líneas de suministro de combustibles fósiles y productos derivados como los fertilizantes.

A nuestro país sólo le interesa la disolución de las fronteras: geográficas, como nuestra frontera con México, de comportamiento, como la frontera entre el hombre y la mujer, psicológicas, como la frontera entre la realidad y la fantasía, y existenciales, como estar vivo o muerto.

Y ahora Rusia, con un coste considerable, debe dar literalmente una lección a Estados Unidos sobre la importancia de las fronteras. Completarán su operación en Ucrania y probablemente eludirán las "sanciones" que se les han impuesto. Su parte del mundo posee ahora toda la producción, muchas de las mercancías valiosas y la mayor parte de la población mundial.

Nuestra parte del mundo parece querer someterse a una tiranía autoimpuesta y al suicidio. Al menos, esa ha sido la tendencia hasta ahora. De repente, la información llega a raudales desde todos los lados, penetrando y haciendo añicos la cúpula de irrealidad bajo la que hemos vivido durante años. Sí, estas vacunas están matando a mucha gente... sí, la comunidad de inteligencia y el DNC derrocaron al anterior presidente... sí, todos los peces gordos de la inteligencia estadounidense te mintieron sobre el portátil de Hunter Biden... sí, ese portátil está lleno de pruebas contundentes de corrupción y, posiblemente, de traición que implican al actual presidente... Sí, la economía estadounidense se está hundiendo porque hemos pedido prestado más dinero del que podemos devolver y no estamos produciendo suficientes cosas de valor... y no, Rusia no está "perdiendo" en Ucrania; al contrario, Rusia está demostrando el compromiso y la fortaleza de una nación interesada en la autopreservación. ¿Crees que podríamos aprender algo de esto?

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