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Exclusivo. Han sido evacuados tres casos de Covid, dos tercios del personal de la base han sido infectados. Todos están en cuarentena hasta el 12 de enero.
Aunque se encuentre situada en la Antártida, el lugar más remoto y aislado del planeta, la Estación Polar Princesa Isabel no se salva de la pandemia de Covid-19, a pesar de las estrictas normas sanitarias vigentes. Entre el personal actualmente presente en la base científica belga, tres miembros fueron declarados inicialmente positivos a la enfermedad, pero el virus ha proliferado... La información de "Soir mag" ha sido confirmada por la Secretaría Polar belga.
El 14 de diciembre se detectó por primera vez un caso positivo de Covid en el equipo que había llegado siete días antes en el segundo vuelo. La persona infectada fue puesta inmediatamente en aislamiento, pero a pesar de ello, las pruebas realizadas al resto de los viajeros revelaron que dos de ellos también habían contraído el virus. Estas tres primeras personas fueron evacuadas el 23 de diciembre.
Pero desde entonces, el virus sigue circulando por la estación. La Estación Polar es un edificio pasivo y, por tanto, especialmente bien aislado. Por lo tanto, ha proporcionado un entorno adecuado para el coronavirus. En la actualidad, 25 personas están presentes en la estación y 5 están de expedición. Dos tercios de estas personas han sido infectadas. Sin embargo, ninguno de ellos sufre actualmente síntomas graves. Además, la estación cuenta con dos médicos de urgencias y todo el equipo necesario tanto para el tratamiento (incluida la intubación) como para los tests PCR.
Todos vacunados
Al ponerse en contacto con las autoridades federales responsables del programa de la Estación Polar Princesa Elisabeth, el explorador Alain Hubert, operador ejecutivo de la estación y responsable de las medidas de seguridad, incluidas las sanitarias, ha declarado que todo el personal presente había recibido dos dosis de vacunas previamente, y que una persona había recibido incluso un refuerzo. También señaló que todas las estaciones polares abiertas en la Antártida están actualmente afectadas por la plaga de Covid.
Reunido de urgencia en la tarde del 27 de diciembre, el Consejo Estratégico de la Secretaría Polar decidió mantener al personal presente en el lugar (bajo reserva de una degradación de la situación sanitaria). También decidió no permitir ninguna otra entrada en la estación antes de que el clúster (foco de contagio) haya desaparecido y, como mínimo, hasta el 12 de enero, fecha de la llegada inicial de dos nuevas expediciones.
¡Finalmente, el Consejo Estratégico decidió acortar al máximo la temporada de investigación y presencia en la estación (que tiene lugar durante el verano ártico) y cancelar y posponer una de las dos campañas previstas, la misión Meteoritos Bamm! (que debía salir anoche de Bélgica hacia la base). El proyecto Recto se mantiene.
Sin embargo, su personal sólo podrá acceder al lugar tras un periodo de cuarentena en Sudáfrica, y cuando todos los miembros presentes en la estación hayan dado negativo en los tests PCR. La anulación de una de las dos misiones se explica por el hecho de que, debido a los acontecimientos, Alain Hubert es actualmente el único guía disponible en el lugar, ya que los otros dos no pudieron acceder a él. Por lo tanto, no puede dirigir dos expediciones en solitario. Su estado de salud y su capacidad de guía también serán comprobados por los dos médicos de la estación.
Según un virólogo consultado por la Secretaría Polar, hay una alta probabilidad de que la infección en la estación se deba a la variante Omicron, ya que ésta representa el 99% de los casos en Sudáfrica, que es el país de última escala antes de la Antártida. Esta variante es menos peligrosa que la variante Delta, pero más contagiosa. Su periodo de incubación es muy corto. El clúster debe extinguirse en un plazo de 15 días.
Medidas draconianas
La contaminación de Covid es, cuando menos, sorprendente, dadas las medidas de seguridad existentes. Todo el personal que partía hacia la estación tenía la obligación de vacunarse y debía someterse a un examen médico antes de partir. Todos recibieron dos dosis de la vacuna (y una persona un refuerzo). Todos tuvieron que someterse a un test PCR en Bélgica dos horas antes de partir hacia Sudáfrica. Luego, un test PCR cinco días después de la llegada a Ciudad del Cabo, pero también diez días de cuarentena. Otro test al salir de Ciudad del Cabo hacia la Antártida y otro test PCR cinco días después de la llegada. A pesar de todas estas precauciones, Covid consiguió entrar en la base. Lo que dice mucho sobre la peligrosidad y la eficacia de esta plaga...
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