Jon Rappoport
David Rasnick [1], doctor en química, que ha trabajado durante mucho tiempo en la industria farmacéutica (Abbott, Prototek, Arris), rompió con la ciencia oficial y se convirtió en presidente de Rethinking AIDS, el grupo para la reevaluación científica de la hipótesis de la existencia del VIH. Fue miembro del Grupo Asesor Presidencial sobre el SIDA en Sudáfrica.
He aquí una reciente y explosiva declaración de Rasnick [2] sobre el Sras-CoV-2 y el VIH. Digerirla nos lleva a una revelación decisiva:
"Los virus son inestables, especialmente los virus de ARN [como el Sras-Cov-2]. Son tan inestables que no existe un virus de ARN sin mutar. Son como los copos de nieve, no hay dos iguales.
El VIH es un virus de ARN de 9.800 nucleótidos. Puede descargar el Compendio de Secuencias del VIH aquí: [3]
En el prefacio dice:
"El número de secuencias [genéticas] en la base de datos del VIH sigue aumentando. En total, a finales de 2017, había 812.586 secuencias en la base de datos de secuencias del VIH, lo que supone un aumento del 8,5% respecto al año anterior.
Ninguna de las secuencias que están destruyendo [sarcasmo] el mundo, incluido el coronavirus generado por ordenador con sus aproximadamente 30.000 nucleótidos, es idéntica”.
Los maníacos del virus utilizan los ordenadores para comparar las secuencias con el fin de encontrar “una secuencia de consenso” para el VIH, el coronavirus y todo lo demás. La secuencia de consenso existe en dos lugares: en los ordenadores y en las cadenas de ARN sintetizadas en el laboratorio.
“Incluso las secuencias de consenso no son estables. Diferentes grupos, utilizando una variedad de algoritmos informáticos, encontrarán invariablemente diferentes secuencias de consenso”.
Las implicaciones de la declaración de Rasnick son enormes. En primer lugar, olvídese de la idea de que el Sras-Cov-2 tiene una sola secuencia genética. Y estas secuencias múltiples no se ensamblan mirando a través de un microscopio mágico. Están compuestas por programas informáticos que tienen algoritmos predefinidos. En otras palabras, las secuencias son construidas mediante CONJETURAS (y no pruebas) incorporadas en los algoritmos.
CUALQUIER vacuna desarrollada para luchar contra el Sras-Cov-2 (incluso si uno cree en la teoría sobre el funcionamiento de las vacunas) debería producir inmunidad contra un virus que muta constantemente, no contra una sola cepa mutada, sino contra un número infinito de mutaciones.
Se trataría de una analogía con la gripe estacional, en la cual los investigadores hacen una suposición cada año sobre la nueva versión del virus y desarrollan una nueva vacuna para esa suposición.
¿Cómo funciona esto? El conjunto de los informes de las agencias de salud pública totalizan cada año, MIL MILLONES de casos de gripe estacional en todo el mundo. Para ir más lejos, si las secuencias genéticas de los virus que mutan constantemente no se descubren, sino que se inventan mediante programas informáticos, ¿qué probabilidades hay de que una vacuna que utilice esos "datos" funcione? Y en el fondo de la pila de suposiciones está, por supuesto, la toma de consciencia de que, si estas secuencias genéticas son inventadas, ¿dónde está realmente aislado el virus? ¿DÓNDE ESTÁ LA PRUEBA DE SU EXISTENCIA?
Dónde está, si como vengo señalando desde hace meses, los investigadores retuercen y tergiversan el significado de la palabra "aislado" de manera que indica que "el virus está en algún lugar de una sopa en un plato en un laboratorio", -definitivamente aislado por la ONU. Esta es la "ciencia" de la virología moderna.
Pero no os preocupéis, alegraos, el test "para el coronavirus" debe ser necesariamente preciso, el número de casos y muertes debe ser necesariamente exacto, y los confinamientos resultantes y que destruyen las economías nacionales y cientos de millones de vidas deben ser necesarios… ¿verdad?
Seguro, ¿por qué no? Digamos que todo está bien. Todo el mundo puede volver a dormirse y dejar que los tiranos destruyan la civilización de la Tierra. O bien, puedes REBELARTE contra el estado policial construido sobre una estafa llamada castillo de naipes que se llama "ciencia".
A diferencia del "virus", la libertad y la independencia son muy reales. La gente puede sentirlos en sus huesos, en sus mentes y en sus almas. Incluso y sobre todo si son esclavos, pueden sentirlos.
Hablando de si realmente existe un virus, aquí hay un artículo que he publicado varias veces:
¿EXISTE EL VIH? UNA ENTREVISTA EXPLOSIVA
Antes de pasar a la entrevista de Christine Johnson, un poco de contexto.
Mi primer libro, AIDS INC. se publicó en 1988. La investigación que llevé a cabo en ese momento constituyó la base de mi reciente trabajo al exponer el enorme fraude conocido como Covid-19.
En 1987-88, mi principal pregunta se había convertido en: ¿el VIH causa el sida? Durante los meses anteriores, había asumido alegremente que la respuesta obvia era que sí. Así que esta pregunta dio un vuelco a mi investigación, ya que me encontré con contradicciones que no podía resolver.
Por ejemplo, en algunas zonas de África, las personas que padecían enfermedades crónicas y morían no necesitaban siquiera ser afectadas por un nuevo virus. Todas sus condiciones y síntomas de "SIDA" podrían explicarse por su entorno: suministro de agua contaminada, aguas residuales vertidas directamente en el agua potable, desnutrición proteico-calórica, hambre, hambruna, tratamiento médico con vacunas y fármacos inmunosupresores, pesticidas tóxicos, tierras de cultivo fértiles robadas por corporaciones y gobiernos, guerras, pobreza extrema. La historia de este virus se ha utilizado como tapadera para ocultar en realidad todos estos crímenes en curso.
Finalmente, en el verano de 1987, descubrí la existencia de varios investigadores que rechazaban la idea de que el VIH causara el sida. Sus estudios fueron convincentes.
Estoy acortando gran parte de mi investigación de 1987-88, pero desde el momento en que el VIH me demostró que estaba fuera de lugar, muchas piezas encajaron. Descubrí, en TODOS los grupos que supuestamente eran de "alto riesgo" para el SIDA, que sus condiciones y síntomas podían explicarse completamente por factores que no tenían nada que ver con un nuevo virus.
El SIDA no era una patología. Era una etiqueta paraguas, utilizada para reagrupar una serie de patologías inmunosupresoras y crear la ilusión de una nueva y única "pandemia". Varios años después de la publicación de AIDS INC, tomé conciencia de un debate completamente diferente que surgía bajo la superficie de la investigación: ¿EXISTE EL VIH?
¿Se ha descubierto realmente el supuesto virus?
Y ESA pregunta llevó a: ¿cuál es el procedimiento correcto para descubrir un nuevo virus?
La siguiente entrevista de 1997, realizada por la brillante periodista independiente Christine Johnson, profundiza en estas preguntas:
¿Cómo deberían los investigadores demostrar que existe un virus en particular? ¿Cómo deberían aislarlo? ¿Cuáles son los pasos correctos? Estas preguntas, y sus respuestas, están en el centro de la mayoría de las investigaciones sobre enfermedades, pero la gran mayoría de los médicos nunca las exploran ni las tienen en cuenta.
Johnson entrevista a la Dra. Eleni Papadopulos, "biofísica y directora de un grupo de científicos especializados en el VIH/SIDA en Perth, Australia Occidental. Durante la última década o más, ella y sus colegas han publicado numerosos artículos científicos que cuestionan la hipótesis del VIH/SIDA… “
Aquí publico y resalto extractos de la entrevista [4] [5]. Se abordan cuestiones técnicas. Captarlas no es el ejercicio más fácil que se pueda hacer, pero creo que el lector serio puede entender los elementos esenciales.
CJ: ¿El VIH causa el SIDA?
EP: No hay pruebas de que el VIH cause el SIDA.
CJ: ¿Por qué?
EP: Por muchas razones, pero sobre todo porque no hay pruebas de que el VIH exista.
...CJ: ¿No fueron Luc Montagnier y Robert Gallo [supuestamente los codescubridores del VIH] quienes aislaron el VIH a principios de la década de 1980?
EP: No. Los artículos que estos dos investigadores publicaron en su momento en la revista Science no demuestran que hayan aislado un virus de un paciente con SIDA. Se dice que el VIH es un retrovirus.
CJ: Pero pretenden haber aislado el virus.
EP: Nuestra interpretación de los datos difiere. Para demostrar la existencia de un virus, hay que hacer tres cosas. Primero, hay que cultivar células y encontrar una partícula que podría ser un virus. Obviamente, como mínimo, tiene que parecer un virus. En segundo lugar, hay que desarrollar un método para obtener esa misma partícula, de modo que se pueda dividir y analizar exactamente lo que contiene. Entonces debes demostrar que la partícula puede hacer copias exactas de sí misma. En otras palabras, que puede replicarse a sí mismo.
CJ: ¿No se puede mirar al microscopio y decir que hay un virus en los cultivos?
EP: No, no podemos. No todas las partículas que parecen un virus son un virus.
CJ: Tengo entendido que la centrifugación de alta velocidad es utilizada para producir muestras compuestas exclusivamente por objetos de la misma densidad, lo que se denomina "muestra purificada por densidad". La microscopía electrónica se utiliza para ver si estas muestras purificadas por densidad están formadas por objetos que que tienen la misma apariencia, en cuyo caso la muestra es un aislado, y si esta apariencia coincide con el de un retrovirus, en términos de tamaño, forma, etc. Si esto es cierto, entonces hay tres etapas en el procedimiento para obtener un aislado retroviral.(1) Dispones de un aislado, y el aislado consiste en objetos con la misma (2) densidad y (3) apariencia que un retrovirus. Luego, debes examinar este aislado más detenidamente para ver si los objetos que contiene contienen transcriptasa inversa [una enzima] y se replican cuando se colocan en nuevos cultivos. Sólo entonces se puede afirmar que se ha obtenido realmente un aislado retroviral.
EP: Exactamente. Se ha descubierto que las partículas retrovirales tienen una propiedad física que les permite separarse de otros materiales en los cultivos celulares. Esa propiedad es su flotabilidad, o densidad, y se ha utilizado para purificar las partículas mediante un proceso llamado centrifugación en gradiente de densidad.
La tecnología es complicada, pero el concepto es extremadamente sencillo. Prepare un tubo de ensayo que contenga una solución de sacarosa -azúcar de mesa común- diseñada de manera que la solución sea ligera en la parte superior pero se vuelve progresivamente más pesada, o más densa, en la parte inferior. Mientras tanto, cultivas las células que crees que pueden contener tu retrovirus. Si estás en lo cierto, las partículas retrovirales se liberarán de las células y pasarán a los fluidos de cultivo. Cuando creas que todo está listo, decanta una muestra de líquido de cultivo y deja caer suavemente una gota sobre la solución de azúcar. Luego haces girar el tubo de ensayo a velocidades extremadamente altas. Esto genera enormes fuerzas, y las partículas de esta gota de líquido se ven obligadas a atravesar la solución de azúcar hasta que llegan a un punto en el que su flotabilidad les impide seguir penetrando. En otras palabras, derivan a lo largo del gradiente de densidad hasta que alcanzan un punto en el que su propia densidad es la misma que la de la región de la solución de azúcar. Cuando llegan, se detienen, todos juntos. Para usar la jerga virológica, ahí es donde se agrupan. Los retrovirus se agrupan en un punto característico. En las soluciones de sacarosa, se agrupan en un punto donde la densidad es de 1,16 g/ml.
Esta banda puede extraerse selectivamente y fotografiarse con un microscopio electrónico. La imagen se denomina micrografía electrónica o EM. El microscopio electrónico permite ver partículas del tamaño de los retrovirus y caracterizarlas por su apariencia.
CJ: ¿Así que el examen con el microscopio electrónico te dice qué pescado has capturado?
EP: No sólo eso. Es la única manera de saber si has pescado un pez.. O cualquier otra cosa.
CJ: ¿Montagnier y Gallo, fueron quiénes procedieron así ?
EP: Ese es uno de los muchos problemas. Montagnier y Gallo utilizaron bandas de gradiente de densidad, pero por alguna razón desconocida, no liberaron ningún Ems [micrografía électrónica - N. del T.] del material a 1,16 g/ml.... Es bastante confuso porque en 1973, el Instituto Pasteur organizó una reunión de científicos, algunos de los cuales se encuentran ahora entre los principales expertos del VIH. En esta reunión se discutió a fondo el método de aislamiento de los retrovirus, y se consideró absolutamente esencial la fotografía de la banda 1,16 del gradiente de densidad.
CJ: Pero Montagnier y Gallo publicaron fotografías de partículas virales.
EP: No. Montagnier y Gallo publicaron micrografías electrónicas de fluidos de cultivo que no habían sido centrifugados, ni siquiera separados de las células de cultivo. Estos Ems contenían, además de muchas otras cosas, iincluidas células de cultivo y otras cosas que claramente no son retrovirus, unas pocas partículas que Montagnier y Gallo pretendían que eran retrovirus, todas las cuales pertenecían a la misma especie retroviral, ahora llamada VIH. Pero las fotografías de partículas no purificadas no demuestran que estas partículas sean virus. La existencia del VIH no fue establecida por Montagnier y Gallo ni por nadie desde entonces utilizando el método presentado en la reunión de 1973.
CJ: ¿Y cuál era ese método?
EP:Todas las etapas que te acabo de describir. Es el único método científico que existe. Cultivar células, encontrar una partícula, aislar la partícula, dividirla, averiguar lo que contiene, y luego demostrar que estas partículas son capaces de producir más de lo mismo con los mismos componentes cuando se añaden a un cultivo de células no infectadas.
CJ: ¿Así que antes de la aparición del SIDA había un método bien probado para demostrar la existencia de un retrovirus, pero Montagnier y Gallo no siguieron este método?
EP: Utilizaron algunas de las técnicas, pero no llevaron a cabo todas las etapas, incluyendo la prueba de qué partículas, si las hay, se encuentran en la banda de 1,16 g/ml del gradiente de densidad, la densidad que define a las partículas retrovirales.
CJ: ¿Pero qué pasa de sus fotos?
EP: Las micrografías electrónicas de Montagnier y Gallo… son cultivos de células enteras, o fluidos no purificados de los cultivos…”
—Extracto del final de la entrevista—
Si entiendes la esencia de esta discusión, verás que hay muchas razones para dudar de la existencia del VIH, porque no se ha seguido la metodología para demostrar su existencia.
Y así... como he señalado en los últimos meses, hay muchas razones para dudar y rechazar la existencia del virus Sras-CoV-2, ya que nunca se han realizado estudios adecuados de microscopía electrónica a gran escala.
Mantuve en mente la entrevista con Christine Johnson, y otras informaciones similares, cuando, por ejemplo, exploré los llamados epidemias denominados Sras y Gripe porcina 2009.
¿Cuántos virus se han identificado como agentes causantes de enfermedades cuando en realidad nunca se han aislado ni se ha demostrado su existencia?
Por supuesto, a los investigadores y a los médicos convencionales se burlaran de cualquier intento de plantear estas cuestiones. Para ellos, "la ciencia está establecida. Eso significa que no quieren pensar. No quieren agitar las aguas.
Hace unos años, el químico David Rasnick envió una solicitud al CDC, pidiendo pruebas de que el virus del Ébola ya había sido aislado de un humano. Las respuestas que recibió no se acercaron ni siquiera a un nivel de certeza.
Después de 30 años de trabajar como periodista en el campo de la profunda falsificación que existe en la investigación médica, he comprobado que la falsa ciencia se produce por niveles. Cuanto más se profundiza, más extraño se vuelve. En otras palabras, cuanto más se profundiza, peor es.
FUENTES:
[1] https://www.davidrasnick.com/
[2] comunicación personal
[3] https://permalink.lanl.gov/object/tr?what=info:lanl-repo/lareport/LA-UR-18-25673
[4] http://virusmyth.com/aids/hiv/cjinterviewep.htm
[5] https://www.immunity.org.uk/articles/christine-johnson/