El plan satánico de nuestros predadores reposa sobre la programación mental que se encuentra en los libros, películas, prensa, canciones, televisión, escuela, entretenimiento…
La programación mental se activa por un periodo bastante largo de tiempo, sin que nadie se dé cuenta con el objetivo de aceptar el plan diseñado.
La elite que dirige es predadora y no tiene el mismo origen que el humano normal, viene de otra descendencia, la de la serpiente, se parece físicamente pero somos sus esclavos, somos sus presas. Creemos que escogemos cuando todo está inscrito en la matrix. Funcionamos como robot siguiendo los símbolos que nos programan, para mantenernos en estado de robot programable y programado sin cortar el hilo. Para la programación mental que sufrimos, las élites satánicas se basan sobre historias vividas que ellos mismos fabrican para recordarnos la programación mental, es como una vacuna de recordatorio, para seguir con las indicaciones dadas, somos sus proveedores de energía, pequeños juguetes que programan en grupo para meternos miedo que es una de las grandes fuentes de energía. Las destrucción de las torres gemelas ya habían sido programada.
En 1997 la serie Los Simpson se adelantó al atentado que tuvo lugar en el World Trade Center de Nueva York el 11/9/2001. Aparece una guía sobre Nueva York que cuesta 9 dólares. Junto al número nueve se muestran las famosas torres gemelas que dibujan un 11.
Las cartas elaboradas por Steves Jackson en 1990 (juego Illuminati) ya predecían el terrorismo mesiánico (la bestia esperada) que el programa de las élites satánicas dominaron Jihad, siguiendo las órdenes.
Ya se había precedido que los musulmanes jugarían el rol de la bestia, el mesías que ellos esperan siguiendo una carta escrita por el masón y cabalista Albert Pike, luciferiano, general de la Confederación Americana
durante la guerra civil de los Estados Unidos, al también masón Giuseppe Mazzini el 15 de agosto de 1871. Pike admite que Occidente usaría el Islam como herramienta para cumplir sus objetivos. Bajo la libertad de expresión se confeccionaron cientos de películas de odio contra el Islam que forma parte de la programación mental.
Según Thedailysheeple, hace un año, los autores Tom Secker et Matthew Alford han preparado un informe detallado sobre la magnitud real de programas de colaboración con el Pentágono y la CIA, basados en 4000 nuevas páginas de documentos archivados previamente casificados.
El informe señalaba entoces que “estos documentos demuestran por primera vez que el gobierno americano ha trabajado detrás del escenario con más de 800 películas importantes y 1000 producciones en la televisión”
Mirando la lista, el telespectador de cine se sorprendería en descubrir los títulos de las películas incluidas: "La caída del halcón negro", "Zero Dark Thirty" (La noche más oscura) y "El único superviviente", pero también películas necesarias para la propaganda del complejo militar industrial como "Ernest Sabes Christmas", "Karate Kid II", "El silencio de los corderos", "Twister" (Tornado) , las películas de "Ironman" y más recientemente "Pitch Perfect 3" (Dando la nota 3).
Cuando un escritor o productor de Hollywood se pone en contacto con el Pentágono y solicita tener acceso a los medios militares para realizar su película, debe someter su script (guión) a los despachos de enlace del sector de entretenimiento para el examen. En definitiva, el hombre facultado para emitir la decisión definitiva es Phil Strub, el jefe de enlace con Hollywood del Departamento de defensa, que ha dirigido este departamento semi secreto desde 1989.
Si hay personajes, acciones o diálogos que la DOD (Departamento de defensa) no aprueba, el cineasta debe efectuar cambios para responder a las demandas del ejército. Si hay rechazo, el Pentágono se levanta de la mesa de las conversaciones. Para obtener una cooperación total, los productores deben firmar contratos, llamados acuerdos de asistencia a la producción, que fuerza a utilizar una versión script aprobada por los militares.
Encontraréis abajo una lista parcial clasificada por orden alfabético en la cual el Pentágono estaba implicado en la redacción del escenario o en la fase de producción, según los documentos desclasificados del gobierno americano.
La lista de 410 películas representa la mitad del número total (por ejemplo Dark Thirty y otras importantes no están presentes y han sido recopiladas por el sitio web de investigación FOIA y Spy Culture.
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