Una vez más, las acciones para defender a los pequeños mercenarios con información susceptible de involucrar a otros y de poner al descubierto las redes del imperio se camuflan en labores humanitarias. Los Cascos Blancos jugaron el rol de propaganda y apoyo a los terroristas vampiros, instrumentos efectivos para implementar el Orden Mundial del esperado, han sido muy activos durante la guerra Siria. Los británicos y americanos habían dirigido a la ocultista hermandad musulmana contra Naser en Egipto, contra Sukarno en Indonesia, contra Bhutto en Pakistán, contra Najibullah en Afganistán y a los mulá chiitas contra el monarca de la dinastía Pahlaví, el último Sah iraní, Mohammad Reza Paheví. Las instrumentalización de los grupos islámicos viene desde lejos.
Las fuerzas sirias se acercan a toda prisa a las fronteras con Jordania, al suroeste sirio y a los altos del Golán, ocupados por Israel y han logrado liberar zonas de las provincias de Daraa y Al-Quneitra, que estaban bajo el control de los instrumentos del Nuevo Orden tras la ofensiva que se inició a comienzos del mes de junio.
Siria está a punto de retomar el control sobre todo el país, la misión de los mercenarios ha llegado a su fin, se han autodestruidos y han alimentado muy bien a las deidades del inframundo, parte de ellos, los que manejan información están siendo evacuados vía Jordania, páis que también ha entrenado a las huestes de Atila de quienes se decía que no crecía la hierba por donde pasaban o del sanguinario mongol mongol Houlagou Khan, nieto de Gengis Khan,quien arrasó Bagdad en el siglo XIIIº, asesinando, incendiado y atormentando a sus habitantes
La radio militar israelí anunció que 800 sirios, miembros de los Cascos blancos y sus familias "habían sido evacuados hacia Israel y transferidos a Jordania, sin precisar cuando tuvo lugar la operación, ni cómo se hizo.
Los cascos blancos se han hecho populares por los vídeos y las fototografías publicadas en la red, presuntamente filmaban a víctimas de los ataques aéreos del ejército gubernamental en las zonas bajo control de los terroristas.
Numerosas veces, sus vídeos han sido puestos en escenas destinadas a diabolizar al ejército sirio. Asimismo difundieron vídeos de supuestos ataques químicos por Damasco que se ha demostrado después que eran falsos
La periodista inglesa Vanessa Beeley ha demostrado las conexiones entre los Cascos Blancos y los grupos.
El hecho de haber sido expatriadas las 800 personas hacia los países que financian y apoyan el terrorismo y no al norte de Siria, y en concreto a la provincia de Idleb donde todavía se encuentra bajo control de los grupos terroristas es sin alguna duda una supuesta recompensa a sus labores de desestabilización que después serán destinados a nuevos escenarios, hasta su destrucción, nadie debe quedar vivo.